Coche conectado

Las tecnologías de conectividad y geolocalización pueden ser muy útiles, pero también convertirse en potentes herramientas para maltratadores o acosadores. Es justo lo que quiere evitar esta nueva normativa en EEUU.

Si no puedes con tu enemigo, únete a él.

Sin un software funcional, los coches solo son un trozo de carrocería con ruedas. En el caso del EX30 controla la mayoría de las funciones clave, incluidos los faros, los espejos laterales y el control del climatizador.

Recordemos que en 2021 el Ejército chino prohibió la entrada de coches Tesla a sus instalaciones porque sus cámaras podían captar información sensible.

La firma va a tener que jubilar anticipadamente al hermano pequeño del Porsche Cayenne porque no cumple las nuevas normas sobre ciberseguridad.

La falta de transparencia es una constante en todas las marcas.

Este curioso sistema hace que el coche tenga "rayos X" para semáforos y otros coches cuando circula detrás de vehículos voluminosos como un camión.

Al usar el coche generamos riqueza, son los datos que la marca recopila sobre el uso que hacemos de él. El Data Act de la UE quiere darnos el control sobre esos datos.

El coche del futuro está formado por pantallas, radares, sensores que monitorean al conductor y que también mapean el entorno, juegos, Inteligencia Artificial, automatización...

El problema, que lleva tiempo sobre la mesa, seguirá creciendo a medida que la tecnología de los coches siga aumentando.

Una de las principales preocupaciones de la agencia estadounidense NHTSA es la manipulación de sensores.

La plataforma de supervisión se ha puesto a prueba en una subida ciclista en Galicia.

En un principio, la plataforma ofrecerá soporte para las apps de las gasolineras.

El CEO de la marca prefiere reflexionar sobre la futura integración de la plataforma en sus modelos.

La marca norteamericana lo pone a prueba en el centro urbano de Colonia.

El demandante, IP Bridge, quiere que Ford pague por el uso de chips 4G para dotar de internet a sus modelos.