
La historia de Mick Schumacher en la Fórmula 1 no parece que vaya a tener un futuro muy halagüeño, pero el hijo de 'El Kaiser' no se rinde. En unas recientes declaraciones, Schumacher ha asegurado que aún sigue moviendo hilos para encontrar un hueco en la parrilla de la Fórmula 1 la próxima temporada, en 2026.
Según el pequeño Schumacher, correr en la Fórmula 1 es su objetivo para 2026 y pide una segunda oportunidad. El problema es que acaba de perder el único vínculo que le unía a la categoría, ningún equipo le tiene como candidato real y parece que nadie está dispuesto a abrirle la puerta de nuevo.
"Mi objetivo es volver en 2026", asegura Schumacher
"Siento que tengo lo que hace falta para la Fórmula 1, veremos qué pasa. El año aún es largo, pero mi objetivo es volver en 2026. Veremos qué ocurre". Esas han sido las palabras de Mick Schumacher, dejando muy claro que está listo para regresar a la Fórmula 1. El problema es encontrar alguien que le de la oportunidad.
Y es que Mercedes acaba de prescindir de sus servicios como probador, y el año pasado con tanto baile de pilotos nadie le dio la oportunidad. Toto Wolff, el jefe de Mercedes, trató de colocarlo en Williams, pero los británicos se negaron en rotundo y acabaron incorporando a Franco Colapinto. De momento, Schumacher se entretiene con Alpine en el WEC.
Sin embargo, ni siquiera la propia Alpine le quiso dar una oportunidad en Fórmula 1 y prefirió ubicar a Jack Doohan, un novato no demasiado brillante. Y es que Schumacher se ganó una fama de destrozar coches bastante costosa durante sus dos temporadas en Haas, y podría estar pasándole factura.
Sin embargo, a Schumacher le ha salido un apoyo. Mika Hakkinen, antiguo rival de su padre y bicampeón del mundo de Fórmula 1, aún cree que "Mick tiene posibilidades de volver, solo tiene que hablar con la gente adecuada. Pero las puertas siguen abiertas". Los hechos del último mercado de fichajes no apuntan en la misma dirección.
De cara a 2026 parece que hay pocos equipos con un hueco disponible para Schumacher. El más obvio sería la nueva escudería Cadillac, pero el alemán no suena entre los candidatos. Los otros equipos con huecos libres en sus planteles, Red Bull y Mercedes, suenan demasiado grandes para Schumacher.
Veremos si el hijo de Michael Schumacher acaba teniendo suerte, pero todo apunta cada vez más a que tendrá que enfocar su carrera lejos de la Fórmula 1.
Imágenes | Alpine