Alejandra Otero
La luz V16, obligatoria desde el 1 de enero de 2026, ha sido objeto de múltiples polémicas: muchos conductores aún no la han comprado porque la DGT no ha informado debidamente y hasta se ha señalado que puede ser hackeada. Pero también ha recibido críticas porque no cumple con su principal cometido como elemento de señalización en caso de avería o accidente: según la situación no se ve bien. O, al menos, no se ve con la suficiente antelación.
Sobre ello advierte un bombero en un vídeo en Instagram mientras asiste a un coche en un accidente: "No dejéis de llevar los triángulos en el coche". En su opinión la baliza v16 conectada es buen complemento, pero los triángulos de toda la vida siguen siendo necesarios para señalizar en determinadas circunstancias. Aunque los triángulos también tienen sus sombras.
"En un cambio de rasante con la luz del día no se va a ver, en una curva tampoco"
Edi Díaz, de 51 años, pertenece al Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia. Es un bombero muy activo en redes sociales, haciendo las veces de divulgador. Es bastante crítico con las luces V16, pues considera que no pueden sustituir por completo a los triángulos de emergencia.
En su último vídeo con las v16 de protagonistas, y que se ha hecho viral, Díaz explica la ineficacia de una baliza conectada en un accidente: vemos un coche volcado en una curva, en una carretera convencional de montaña y tras un cambio de rasante.
"Dime aquí dónde meto esto, esta baliza, ¿qué hacemos con ella? ¿Dónde la colocamos?", pregunta V16 en mano. "Recomendación como profesional: No dejéis de llevar los triángulos en el coche. ¿Por qué? En un cambio de rasante con la luz del día no se va a ver, en una curva tampoco. O señalizamos bien 50 m antes o podemos tener un problema. 50 m para que los demás vehículos puedan aminorar", argumenta.
Díaz lo tiene claro: la V16 es buen complemento, pero en este tipo de situaciones un triángulo es más eficaz para señalizar un accidente y que el resto de vehículos frenen o estén alerta anticipando que hay un coche como mínimo averiado orillado en la carretera. "Está bien como algo más, como algo adicional". Lo mismo en un caso de incendio, como explica en otro vídeo.
Los triángulos tampoco son infalibles. El principal argumento para imponer estas V16 con elemento de señalización es que reducen el riesgo de atropello al no tener que bajarnos del vehículo para indicar una avería. También está pensada para usuarios que no puedan salir del coche, desde motivos de salud hasta estar impedidos por el propio accidente.
Pero la propia DGT ha admitido que tiene puntos débiles, como precisamente su poca visibilidad en días soleados, así como en cambios de rasante y curvas pese a que obligatoriamente tienen que ser visibles a 1 km como mínimo. Entidades como la Asociación Unificada de Guardia Civiles han advertido de este problema: si se han dado casos de coches chocándose contra un coche patrulla por no ver los luminosos de noche, ¿cómo se va a ver una V16 a pleno sol?
No obstante, los propios triángulos tienen sus puntos débiles. Primero porque depende de que los coloquemos bien. En carreteras convencionales hay que colocarlos a un mínimo de 100 m según la normativa, pero si no se ve bien por vegetación, por estar en una curva o cambio de rasante, deberemos seguir andando fuera de la calzada (como exige el artículo 130.3 del Reglamento de Circulación) hasta dar con el punto correcto. Algo que no siempre es posible en una carretera de montaña.
En una convencional no hay luminosos. Las V16 lo que hacen es emitir una señal que recoge la Plataforma DGT 3.0, alertando al resto de conductores mediante los paneles luminosos en la carretera o desde el propio coche si tiene conexión. Si bien la DGT reconoce que no se detecta correctamente en los mencionados supuestos, también argumenta que "tiene doble doble visibilidad".
"En caso de encontrarnos en una curva o en un cambio de rasante no se va a ver físicamente, pero sí tienes esa visibilidad virtual, esa conexión con el navegador que te va a indicar antes de que tomes la curva que hay un vehículo detenido, esa es la gran ventaja de estos dispositivos".
El triángulo virtual V27, una solución a medias. Pero esa doble visibilidad que argumenta tráfico tiene otro inconveniente: en carreteras convencionales como la que pone de ejemplo el bombero no hay paneles luminosos. Y muchísimos coches no disponen de conectividad y aunque la tengan, dependen de que la marca se conecte a la plataforma de la DGT.
La solución de la DGT es el triángulo virtual o señal V27. Esta señal telemática, y vinculada a la V16, se mostrará en el sistema de a bordo del coche siempre y cuando esté conectado con el Punto de Acceso Nacional de Información de Tráfico y Movilidad. Pero tiene un problema similar: si el coche o el proveedor del navegador no está dado de alta en este sistema, ese coche tampoco recibirá dicha señal.
Imágenes | Edi Díaz en Instagram
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