El apagón de la red 2G se producirá en 2030, pero Nissan ha decidido desconectar a los primeros Nissan Leaf y Nissan e-NV200 de esta red mucho antes. Lo hará el mes que viene y dejará a los usuarios de estos modelos sin la posibilidad de utilizar los servicios conectados.
Eso significa que ya no podrán utilizar funciones remotas, como el encendido y apagado del climatizador o la selección de un tramo horario para cargar su coche a través de la app de su teléfono móvil.
Después de los teléfonos móviles, vienen los coches desactualizados a propósito
Uno de los inconvenientes que tienen los smartphones es que su software no se actualiza de forma indefinida. Cuando los fabricantes deciden, dejan de ofrecer actualizaciones periódicas y, a efectos prácticos, eso significa que un teléfono móvil pasa a ser algo parecido a un pisapapeles porque deja de ser compatible con la mayoría de apps.
Da igual lo mucho que hayan cuidado los clientes su teléfono y si funciona perfectamente: llegado el momento, deja de actualizarse y va siendo hora de pensar en cambiarlo por otro teléfono más moderno, con el gasto que conlleva.
Pues bien, esa especie de obsolescencia forzada por los fabricantes está a punto de llegar a los coches porque Nissan va a acabar con las funciones conectadas que ofrecen sus primeros coches eléctricos, el Nissan Leaf de primera generación y el Nissan e-NV200.
Ambos modelos fueron dos de las primeras alternativas completamente eléctricas que llegaron al mercado, de hecho, el Leaf se puso a la venta hace 14 años, puesto que se lanzó en el año 2010. En ese momento, no solo era innovador su tren motriz de cero emisiones, también lo fueron sus funciones de conectividad que aprovechaban la conexión a internet del vehículo.
Entre otras cosas, a través de una app en el teléfono móvil que se conectaba con el coche, los clientes podían encender o apagar de manera remota el climatizador para calentar o enfriar el coche a distancia. También podían elegir la franja horaria a la que cargarlo para hacerlo en el momento en el que la electricidad fuese más barata o simplemente cuando les interesase.
Esas funciones a remotas que podían utilizarse gracias a la conectividad llamaron la atención de muchos clientes, llegando a ser un motivo de peso a la hora de comprar el coche. Ahora es algo muy común, pero era muy innovador en ese momento. Y más en una marca generalista.
Muchos de los Nissan Leaf y de los e-NV200 que se compraron en esos años siguen circulando a diario, al fin y al cabo, no son coches viejos. Sin embargo, a partir del 1 de abril los dueños de estos modelos no podrán utilizar las funciones remotas a través de su móvil.
Nissan ha tomado la decisión de “desconectar” los servicios conectados de los primeros Nissan Leaf y e-NV200. Según recoge Carscoops, Nissan se lo explicó a la BBC: "La aplicación NissanConnect EV actualmente vinculada a los vehículos Nissan Leaf y e-NV200 producidos hasta 2016 se cerrará a partir del 1 de abril de 2024 en preparación para el fin de la tecnología 2G".
Lo curioso de esa explicación es que la red 2G, que es la que utilizan los modelos eléctricos de Nissan para estar conectados, se apagará en 2030, por lo que todavía quedan más de cinco años para el fin de la tecnología 2G al que hace alusión Nissan. No hay, por lo tanto, ninguna necesidad de cerrar la aplicación NissanConnect EV en este momento. O al menos no sirve justificarlo con el fin del 2G porque no es, para nada, inminente.
Según señala Carscoops, Nissan avisará a lo largo de estos próximos días a los dueños de estos coches del cierre de la app a través de un correo electrónico, por lo que les ha pillado completamente por sorpresa. Evidentemente, es algo que les frustrará porque ellos compraron el coche con la posibilidad de utilizar estas funciones y ahora tendrán que prescindir de ellas a la fuerza, aunque el coche funcione perfectamente. Como cuando un móvil deja de actualizarse.
Viendo la decisión de Nissan, es inevitable pensar qué pasará con los coches actuales que se actualizan vía OTA (Over The Air) para que su software se mantenga al día y cuente con nuevas funciones cada cierto tiempo. Lo que está haciendo Nissan sienta un precedente y otros fabricantes podrían hacer lo mismo para “animar” a sus clientes a cambiar su viejo coche “desactualizado” por uno más moderno. Con los móviles duele porque no son baratos, pero un coche supone un desembolso todavía más grande.