
La llegada de la Fórmula 1 a Madrid se acerca y es hora de ir perfilando los detalles. A un año y medio vista del primer Gran Premio de Madrid, que se celebrará en septiembre de 2026 con casi toda seguridad, la capital ya está manos a la obra con los preparativos, y ha aparecido un gran obstáculo en el horizonte: el ruido.
En su informe inicial, IFEMA reconoce que será imposible "reducir los niveles de ruido a transmitir por debajo de los límites legalmente establecidos". Así que en Madrid tienen un plan para evitar un nuevo caso Bernabéu: suspender temporalmente la normativa sobre ruidos durante el Gran Premio.
Madrid incluso baraja un "traslado temporal de la población afectada" durante el Gran Premio
Muchos desafíos aparecen en el horizonte del futuro Gran Premio de Madrid a solo un año y medio de su primera edición. La contaminación y los daños económicos a los negocios aledaños han sido señalados por la propia organización como grandes problemas, pero hay uno que parece imposible de esquivar: el ruido.
Así lo reconoce la propia IFEMA en su informe previo. Allí reconocen que el Gran Premio "puede producir molestias a la población. Pero todas salvo el ruido se podrán minimizar hasta hacerlas compatibles". Para este último escollo se tendrán que tomar medidas especiales de excepción para evitar otro caso Santiago Bernabéu.
Se estima que el ruido provocado por un Fórmula 1 puede rondar en torno a los 100 decibelios, y desde la organización se apunta a que los vecinos solo tendrán que soportar 13 horas, que serán las que los coches estarán en pista, contemplando también las categorías teloneras que acompañen a la Fórmula 1 en Madrid.
El problema es que las propias ordenanzas de Madrid establecen que el límite de decibelios en ningún caso puede superar los 55, así que los organizadores se plantean cortar el problema por lo sano: que el Ayuntamiento de Madrid suspenda de manera temporal la ordenanza de límites de ruido, solo durante el Gran Premio.
Pero es que en el informe autonómico incluso se menciona la posibilidad de hacer un "traslado temporal de la población afectada" durante el evento. Todo por evitar que un nuevo caso de demanda colectiva como la de los vecinos del Santiago Bernabéu arruinen el proyecto de Madrid en la Fórmula 1, que por contrato llega como mínimo hasta 2035.
Recordemos que, irónicamente, el circuito clásico de Madrid, el Jarama, ya se encuentra muy limitado por las protestas vecinales contra el ruido. La historia podría repetirse en IFEMA.
Fotos: IFEMA