En 1990 un piloto fue succionado por la ventanilla de la cabina a 5.000 metros. Sobrevivió porque le sujetaron por los tobillos durante 20 minutos

"Su cara golpeaba contra la ventana y le salía sangre por la nariz y un lado de la cabeza, sus brazos se agitaban"

Mayday
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Victoria Fuentes

10 de junio de 1990: el vuelo BA5390 de British Airways con 81 pasajeros a bordo sale desde Birmingham, Inglaterra, con destino a Málaga. Tras un despegue sin problemas y cuando ha alcanzado una altitud de 17.000 pies, comienza la pesadilla.

El parabrisas delantero ha volado por completo, succionando al capitán a través de la abertura: Tim Lancaster está pegado al exterior del avión, con las piernas enredadas en la columna de control. Pero sus pies también han empujado los controles del avión hacia adelante en una pronunciada caída.

20 minutos soportando vientos de más de 600 km/h. Y todo por unos tornillos demasiado pequeños

Es posible que hayas visto la imagen: un hombre fuera de un avión en pleno vuelo, soportando temperaturas extremas, vientos huracanados y que solo se sujeta por las piernas. Se trata de una representación del documental canadiense 'Mayday', pero es uno de los accidentes aéreos más surrealistas de la historia (bueno, también está aquel provocado por un cocodrilo, pero ese fue más trágico). Sin embargo terminó bien: Lancaster sobrevivió pese a las fracturas, congelación y conmoción severa, detalla la BBC.

Cuando ya se había alcanzado la velocidad de crucero y el piloto y copiloto se disponían a tomar una taza de té, se escuchó el sonido de una bomba: era fruto de la descompresión de la cabina porque el cristal había salido volando. Tras la confusión y una cabina llena de niebla se dieron cuenta de que Lancaster había sido succionado al exterior del avión, y que solo se sujetaba por las piernas.

Gracias al auxiliar de vuelo Nigel Ogden que le sujetó como pudo, Lancaster sobrevivió de milagro: "Pensé que lo iba a perder, pero terminó doblado en forma de U alrededor de las ventanas. Su cara golpeaba contra la ventana y le salía sangre por la nariz y un lado de la cabeza, sus brazos se agitaban", detalla Ogden. No es para menos porque estuvo 20 minutos soportando vientos de más de 600 km/h.

En la serie documental 'Mayday' el piloto cuenta lo que recuerda sobre el momento en que la ventana se desprende del avión: "Recuerdo que vi el parabrisas saliendo hacia afuera de la aeronave y luego desapareció como una bala en la distancia". En medio del pánico en la cabina, Atchinson, el copiloto, logró aferrarse a su asiento y retomó el control del avión y efectuar un aterrizaje seguro.

Pero, ¿cómo pudo pasar esto? Según detalla el medio británico, en su informe final, la Rama de Investigación de Accidentes Aéreos del Departamento de Transporte británico concluyó que un mantenimiento defectuoso del parabrisas, realizado 27 horas antes del despegue del avión, provocó su caída en pleno vuelo. Concretamente un conjunto de tornillos demasiado pequeños.

A los cinco meses del accidente, Tim Lancaster volvió a ponerse a los mandos de un avión.

Imagen | Mayday Air Disaster/Youtube

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