
Entre otras muchas cosas, el presidente de Estados Unidos Donald Trump prometió defender la economía estadounidense y solo unos días después de volver a la Casa Blanca, está poniendo en marcha políticas proteccionistas para cumplir su objetivo. O al menos para intentarlo.
Trump ha impuesto aranceles del 25% a los productos importados de México y Canadá y ha subido un 10% los aranceles a China. Esta medida afecta directamente a la industria del automóvil y preocupa especialmente a gigantes de la talla de Volkswagen.
Trump no descarta imponer también aranceles a Europa
Durante la segunda mitad del siglo XX y, sobre todo, en lo que llevamos de siglo XXI, la globalización ha sido la tónica del comercio, sin embargo, desde hace unos meses, estamos viendo un cambio de paradigma porque ciertos mercados están apostando por el proteccionismo. Ese es el motivo por el que últimamente no dejamos de hablar de aranceles, es decir, de impuestos especiales a los productos importados por el hecho de fabricarse en otros países.
Canadá, Europa y Estados Unidos están utilizando esta herramienta, principalmente, para proteger su industria del automóvil de la cada vez más peligrosa industria del automóvil china. Bien es verdad que los aranceles no se limitan al sector del automóvil, pero, especialmente Estados Unidos, recurre a estos impuestos para proteger este sector tan importante para su economía, tanto con el presidente Biden como con el actual presidente Trump.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) February 1, 2025
Este último solo lleva unos días en el cargo, pero está utilizando los aranceles desde el primer minuto, hasta el punto de que ya se habla de guerra comercial. Y es que la Casa Blanca acaba de imponer aranceles del 25% a las importaciones de México y Canadá (10% para los productos energéticos), así como un incremento de un 10% a los aranceles a las importaciones de China.
Esta medida afecta directamente a la industria del automóvil y, lógicamente, preocupa a los grandes fabricantes porque el precio de los coches se va a disparar (todavía más), hasta el punto de que algunas marcas consideran que sus productos van a dejar de ser competitivos en el mercado estadounidense.
Es el caso de Volkswagen. La fábrica que el grupo alemán tiene en Puebla, México, es la más grande de ese país y una de las más importantes para el grupo en todo el mundo. Según señala Reuters, Volkswagen Puebla produjo casi 350.000 coches en 2023, incluye modelos como el Jetta, el Tiguán y el Taos, todos ellos para exportarse al mercado estadounidense. Con los nuevos aranceles que ha anunciado Washington, estos coches serán un 25% más caros en Estados Unidos, por lo que pasarán a ser productos mucho menos competitivos.
Audi también fabrica en México para Estados Unidos toda la gama Q5 y el SUV alemán es el coche más vendido de la marca de los cuatro aros en el mercado estadounidense. Por su parte, BMW fabrica en México el Serie 2 Coupé y el M2 para todo el mundo, además del Serie 3 para Estados Unidos. De ahí que Alemania tenga tanto miedo.
"Estamos evaluando cualquier posible efecto en la industria automotriz y nuestra compañía como resultado de las tarifas anunciadas. Contamos con conversaciones constructivas entre los socios comerciales para garantizar la seguridad de planificación y la estabilidad económica y evitar un conflicto comercial", dice Volkswagen, en declaraciones recogidas por Reuters.
Tan preocupantes son los nuevos aranceles de Estados Unidos que el canciller alemán Olaf Scholz ya se ha pronunciado al respecto, señalando que es importante no dividir al mundo con nuevas barreras comerciales y que la globalización beneficia a todo el mundo.
"Trataremos de continuar las relaciones económicas junto con la perspectiva de la cooperación y la colaboración. Es importante no dividir al mundo", dijo el canciller este fin de semana tras reunirse con su homólogo británico, Keir Starmer.
Más allá de los aranceles que ya ha puesto en marcha Estados Unidos y que afectan a las inversiones de muchas empresas europeas, como Volkswagen, lo que preocupa es que Trump anuncie aranceles para los productos europeos. El presidente de Estados Unidos ya ha asegurado que extenderá su guerra comercial a la Unión Europea, como señala RTVE.
El propio Trump ha reconocido que estas decisiones pueden perjudicar a la economía estadounidense, pero asegura que “merecerá la pena”: “¿HABRÁ ALGO DE DOLOR? SÍ, TAL VEZ (¡Y TAL VEZ NO!), PERO HAREMOS QUE ESTADOS UNIDOS SEA GRANDE OTRA VEZ, Y VALDRÁ EL PRECIO QUE HAYA QUE PAGAR”, ha indicado Trump en redes sociales en un mensaje publicado en mayúsculas.