Volkswagen tendrá que detener la producción de sus vehículos eléctricos durante al menos una semana en dos de sus fábricas alemanas por problemas con la cadena de suministro, lo que afectará directamente a las entregas de coches eléctricos para varias de las marcas del Grupo alemán. Entre ellos, se encuentran los Volkswagen ID.3 e ID.4 y el CUPRA Born.
Protegiendo la producción de eléctricos
Los problemas en la cadena de suministro, y especialmente la escasez de chips, llevan más de un año afectando directamente a la industria automotriz y generando un gran impacto en prácticamente todos los fabricantes.
Hasta ahora el Grupo Volkswagen ha estado priorizando la producción de sus vehículos eléctricos así como de sus modelos que más margen de beneficio aportan pero, según informa el medio alemán Automobilwoche, el Grupo no podrá seguir protegiendo la producción por falta de chips. Al menos, no como hasta ahora.
Mientras que las líneas de producción del Volkswagen Golf y del Tiguan se detienen regularmente en Wolfsburg, los coches eléctricos de Volkswagen han ido teniendo preferencia en cuanto a stock de semiconductores. Así, la producción en Zwickau y Dresde no ha sufrido grandes interrupciones a lo largo de este año.
Sin embargo, estas dos factorías (dos de las principales fábricas del Grupo VAG en Alemania), tendrán que parar su producción por el momento durante una semana mientras esperan suministros. Estos importantes parones afectarán directamente tanto a Audi, como a CUPRA o Volkswagen, pues según las fuentes de la publicación alemana, dejarán de producirse al menos 5.000 vehículos.
En la planta de Zwickau, Volkswagen produce los Volkswagen ID.3 e ID.4, el Audi Q4 e-tron y el CUPRA Born, así que es lógico pensar que la disponibilidad y las entregas de estos modelos sea limitada temporalmente debido a la interrupción de la producción.
Si como tienen previsto, estas dos fábricas pueden retomar su actividad tras una semana, con suerte para el fabricante estos primeros paros importantes en Alemania no afectarán de forma significativa a sus cuentas.
Solo durante el tercer trimestre del año, el Grupo Volkswagen ya ha entregado más de 120.000 vehículos eléctricos en todo el mundo, lo que representa un aumento del 109% con respecto al mismo período en 2020.
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