La Asociación de Fabricantes de Señales Metálicas de Tráfico (AFASEMETRA), dedicada al fomento de acciones coordinadas y conjuntas de cara a potenciar el sector del equipamiento de la carretera, ha elaborado un informe sobre las señales y carteles de tráfico que pone de nuevo sobre la mesa la falta de inversión en infraestructuras.
Según el estudio más de 2,3 millones de señales y 350.000 metros cuadrados de carteles de orientación instalados en España tienen vencido el plazo de garantía de su lámina retrorreflectante. AFASAMETRA calcula que es necesaria una inversión de más de 196 millones de euros para subsanar este déficit.
El estudio se ha basado en el supuesto de que en el año 1993 todas las señales y carteles de orientación estuviesen dentro del periodo de garantía de la lámina retrorreflectante, por lo que los resultados reales podrían ser mucho mayores. El periodo de garantía ofrecido por los fabricantes varía entre 7 y 10 años.
Un peligroso déficit
La principal víctima de una falta de inversión en infraestructura es siempre la misma: la seguridad vial. Esta asociación que se define como sin ánimo de lucro ni fines políticos y en la que se integran 10 empresas del sector de la señalización, ha pedido al Gobierno afrontar un plan inversor a 4 o 5 años que subsane esta situación.
En el caso de las señales verticales en mal estado acarrea una pérdida de visibilidad, por obsolescencia, que podría provocar accidentes y consecuencias de responsabilidad jurídica a los titulares de las diferentes vías.
Según la asociación, desde 2007 A 2016 el volumen de mercado del sector de la señalización vertical ha descendido más de un 60 % por esta falta de inversión.
De hecho, hace unas semanas el secretario general de Infraestructuras de Fomento, Julián López Milla expresó la intención del Gobierno de reabrir el debate de un posible modelo de pago por uso para conservar y mantener las carreteras españolas, que asegura acumulan 2.000 millones de euros de déficit en conservación desde 2012.
Sin embargo, un informe publicado en 2018 por la Asociación Española de la Carretera (AEC) cifraba el déficit de inversión en mantenimiento que España acumula en 7.000 millones de euros. Y en 2016, la AEC ya denunciaba en un informe que la inversión en la red viaria disminuyó en un 22,9 %.