Roberto Montijo
A veces el destino se comporta como un boomerang, y eso exactamente es lo que le ha ocurrido a Carlos Sainz en el Gran Premio de los Países Bajos. El piloto español sufrió en Zandvoort una penalización que atenta contra toda lógica del automovilismo pero, reglamento en mano, es justa. Eso aprobaron los propios pilotos de Fórmula 1.
Como director de la GPDA, la asociación de pilotos, Sainz defendió una norma que permite al que va por el interior echar fuera de la pista a su rival. En Zandvoort se quejó amargamente de su penalización y del trato que le dio la FIA, que ni siquiera quiso atenderle. Podría ser el primer paso para revocar la norma que se está cargando la Fórmula 1.
Si vas por el interior, puedes echar de pista al piloto que te quiere adelantar, según la norma
"La penalización es incomprensible y todavía me la tienen que explicar, porque yo estoy muy confundido". Eso decía Carlos Sainz después de ser sancionado con diez segundos en Zandvoort tras un toque con Liam Lawson. Y, efectivamente, Sainz tiene toda la razón en que la sanción es absurdo. Pero reglamento en mano es justa, y él mismo lo apoyó.
La FIA ya recordó hace unos meses el manual para el buen adelantamiento en la Fórmula 1, que fue aprobado hace unos años a petición de los propios pilotos, que fingían no aclararse sobre cuándo eran penalizados por expulsar a otro corredor fuera de pista. Desde entonces, si vas por dentro tienes derecho a echar del circuito a tu rival, y eso mismo le pasó a Sainz en Zandvoort.
Sainz se puso en paralelo con Lawson al final de la primera curva, en frenada, buscando el adelantamiento. Pero el neozelandés, sospechoso habitual de ser poco limpio, decidió acogerse al reglamento. Abrió el volante y chocó contra Sainz. El resultado fue que ambos pincharon una rueda, perdieron un minuto y se fueron al fondo del pelotón.
En cualquier reglamento normal la sanción sería para Lawson o, como mínimo, se dejaría en lance de carrera. Pero en la actual Fórmula 1, a Sainz le cayeron diez segundos de penalización. Y el español puede patalear y clamar al cielo, pero lo cierto es que como director de la asociación de piloto es cómplice y hasta responsable del reglamento que ellos mismos impulsaron.
"Hay pilotos con los que no puedes hacer una curva en paralelo", se lamentaba Sainz sobre Lawson. Pero lo cierto es que el de Racing Bulls solo fue poco inteligente, ya que perdió unos puntos muy bien encarrilados, pero no sucio. Al menos no con el reglamento en la mano. Y Sainz perdió otros diez puntos más con su compañero en un fin de semana en el que le había batido.
Consecuencias de implantar un reglamento únicamente por el capricho de unos pilotos que se cansaron de defender y prefirieron optar por lo fácil: echar a tu rival de pista sin ser sancionados por ello.
Imágenes | Williams
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