Con el récord al vehículo de producción más rápido del mundo en el punto de mira, Hennessey presenta su última obra, el llamado Hennessey Venom F5, que no es más que una evolución del bestial Venom GT. Según estimaciones, el F5 podría alcanzar las 290 millas por hora, es decir, 466,71 km/h. ¿Lo conseguirá?
La compañía estadounidense ha trabajado de forma importante en la aerodinámica del Venom, basado inicialmente en un Lotus Exige, que ahora reduce la resistencia aerodinámica de 0,44 a 0,40, manteniendo una gran cantidad de carga aerodinámica gracias al difusor trasero, al gran alerón retráctil y al diseño de los bajos del vehículo.
Bajo su llamativa carrocería late un enorme 7.0 litros V8 biturbo, que en el Venom GT desarrollaba 1.261 CV y en este caso alcanza la friolera de 1.419 CV. Gracias a sus 1.300 kilogramos de peso conseguidos a base de aluminio y fibra de carbono, Hennessey vaticina mejores marcas que el Venom GT en el 0-300 km/h (13,63 segundos) y en el 0-322 km/h (14,51 segundos), aunque de momento no hay datos oficiales de prestaciones.
Una de las novedades del Venom F5 es que se ofrecerá con una nueva transmisión automática (de un único embrague) accionada mediante levas en el volante, más ligera que la caja de cambios manual convencional y más rápida en lo que a prestaciones se refiere. Hennessey también promete un sistema de tracción y estabilidad basado en información GPS, aunque no se ha detallado su funcionamiento.
La presentación oficial del modelo quedará para 2015, pero no se comenzará a entregar a clientes hasta finales de 2016. Se fabricarán al menos 30 unidades, una vez Hennessey haya fabricado el último de sus Venom GT (llevan 16 de un total de 29). Se desconoce su precio, pero probablemente será más caro que el Venom GT, cuya etiqueta reza 1,2 millones de dólares americanos (unos 900.000 euros al cambio).