El Nissan-DeltaWing llegó a las 24 horas de Le Mans con muchas ganas de hacerlo bien. A pesar de unirse al proyecto a posteriori, la marca japonesa ha acogido a Ben Bowlby y su curioso DeltaWing como una parte más de su proyecto deportivo. Y desde entonces lo gritado a los cuatro vientos.
Quizás el más orgulloso de todos sea Darren Cox (al que podemos ver en el vídeo consolando a Satoshi Motoyama). Al director general de Nissan en Europa le va mucho más el traje de faena que la corbata por ello no son extrañas todas las alabanzas hacia el DeltaWing. Pero el sueño se truncó antes de la cuenta. Decía Nissan que en un proyecto que había nacido hace poco más de 100 días, cada vuelta dada en carrera iba a ser un premio. El Nissan-DeltaWing fue aguantando hasta que Kazuki Nakajima cometió uno de esos errores por los que tantos recordamos su paso en la Fórmula 1.
Al volante del Nissan-DeltaWing, Satoshi Motoyama poco o nada pudo hacer para evitar la colisión con el Toyota TS-030 Hybrid de su compatriota. El golpe contra los guardarraíles hizo el resto. Pero a pesar de tener un lateral seriamente dañado, Motoyama hizo todo lo que estuvo en su mano para tratar de llegar a boxes, reparar y continuar con el sueño. En la edición de 2012 de las 24 horas de Le Mans, nadie mejor que el japonés para encarnar el espíritu de que lo importante es ver la bandera a cuadros. Por eso, todos los equipos y pilotos se felicitan más allá del resultado.
