A sólo unos días que el Consumer Electronics Show 2018 de Las Vegas abra sus puertas, Fisker ha liberado otra imagen de su EMotion, y en este caso no se trata de ningún render. La reconvertida marca de Henrik Fisker tiene lista su nueva creación y este es el aspecto definitivo de un coche que, si los datos que anuncia son ciertos, promete mucho.
El fabricante americano promete una autonomía con la que el EMotion puede recorrer hasta 644 km con una sola carga y que es capaz de soportar cargas ultra-rápidas para acumular en sólo 9 minutos la energía equivalente a 200 km.
Hasta 644 km de autonomía y 200 km en 9 minutos
Su motorización eléctrica recurre a alimentarse a través de una nueva generación de baterías de estado sólido, una tecnología muy distinta a la que actualmente emplean el resto de eléctricos de la industria y que presenta notables ventajas, por eso es el camino que tomará todo el que quiera tener un eléctrico que se precie porque sus capacidades son muy superiores a las de iones de litio. De hecho tanto Porsche como Toyota ya están trabajando en ello.
Por fuera se trata de un coche que conserva todas o prácticamente todas las siluetas mostradas en los primeros prototipos, una berlina de cinco puertas de líneas musculosas y muy marcadas que mantiene la filosofía de los primeros modelos pero las aproxima muchísimo a su mayor rival: Tesla.
Y es que la marca de Elon Musk es en la que Fisker tiene puesto su punto de mira. La asociación entre Tesla y coche eléctrico de lujo con gran autonomía es directa, justo donde el EMotion quiere hacer daño con una personalidad propia y capacidades que puedan superar a las de su competencia ya asentada en el mercado.
En conversaciones con Autocar, Henrik Fisker afirmaba que esta nueva generación de baterías ocupa menos espacio, lo que junto con la ausencia de un motor en el capó ha ayudado a reposicionar el habitáculo moviéndolo notablemente hacia delante. "Hemos podido pegar la cabina a la rueda delantera y crear unas formas muy dinámicas. Hemos cambiado las proporciones porque queremos ser originales", aseguraba el propio Fisker.
Y lo cierto es que sí, resulta un conjunto aparentemente original con ese morro puntiagudo en el largo voladizo delantero, la línea del techo descendente y un voladizo trasero extremadamente corto, casi testimonial.
Sus dimensiones parecen compactas y ayudan a afianzar la musculatura con unas formas que son más propias de un coupé que de una berlina. Aún así conserva espacio para cuatro ocupantes en su interior gracias en gran parte a las puertas de apertura... invertida.
Para tratar de superar a los Tesla Model S, el EMotion estará dotado de las aptitudes necesarias para realizar conducción autónoma (no han especificado de momento de qué nivel), con un potente lídar oculto tras la parrilla delantera.
Tras su presentación sólo faltarán unos meses hasta que las primeras unidades lleguen con cuentagotas a las carreteras americanas a un precio estimado de 129.900 dólares. Tras él, Fisker tiene planeada la creación de un segundo modelo más modesto y sobre una plataforma modular a través de la que completar la gama.
