La amenaza por parte de Bruselas ante la moratoria de multas en Madrid Central se convirtió hace unos días en una denuncia a España de la Comisión Europea por los altos niveles de contaminación en Madrid y Barcelona. A pesar de que la principal promesa electoral del nuevo alcalde madrileño, José Luis Martínez-Almeida, era acabar de forma "urgente" con la zona, ahora las tornas han cambiado.
Según explica El País, el delegado de Movilidad, Borja Carabante, ha recordado que Madrid Central "sigue estando vigente y hay que cumplir con las exigencias y con el régimen sancionador".
Un modelo alternativo que se presentará en septiembre
A pesar de que los tribunales impidieron que el PP congelara las multas por acceder a este área de tráfico restringido, las últimas declaraciones del Ayuntamiento hacen que todo quede en agua de borrajas.
Carabante ha aseverado que será el PP el primero que sancione "definitivamente por acceder a Madrid Central porque el anterior Ayuntamiento no lo hizo, no se sancionó a ningún vehículo con etiqueta B o C".
Ahora le toca el turno a las reuniones con la Mesa de Seguimiento de Madrid Central, formada por 30 colectivos entre los que se encuentran organizaciones ecologistas, empresarios, ANFAC y el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo entre otros.
La estrategia del nuevo consistorio se basa en encontrar un modelo alternativo y "más eficaz" que el creado por el equipo de Manuela Carmena que presentarán en septiembre, según afirma el mismo. Según Almeida ya ha trasladado a la Comisión Europea su intenciones.
Partirán del Plan A de calidad del Aire aprobado por Ahora Madrid y adoptarán medidas como la renovación de las flotas y de las calderas de gasoil y carbón.
Recuerda, la moratoria de sanciones ha quedado temporalmente suspendida... ⛔🚗
— Línea Madrid (@Lineamadrid) July 8, 2019
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Desde que comenzaron a emitirse por primera vez las multas el pasado 16 de marzo, el Ayuntamiento informó de un total de 4.460 expedientes sancionadores, pero un defecto de forma anuló miles de ellas.
Recordemos que desde el pasado 8 de julio las multas por acceder a la almendra central se han reactivado, lo que significa que las restricciones al tráfico vuelven a ser efectivas para aquellos vehículos de no residentes que circulen por el área de exclusión sin etiqueta medioambiental o para aquellos que con etiqueta B o C circulen sin aparcar en aparcamiento público.
Las multas aplicadas son de 90 euros que se quedan en 45 euros con pronto pago.
