Dijo Anónimo una vez: “Como no sabían que era imposible, lo hicieron”. Eso es lo que ha pasado con el ranking mundial de constructores de automóviles en el primer semestre de 2009. Ford, que antaño fue el segundo constructor mundial, acabó cediendo ante Toyota, que posteriormente destronó a Dios General Motors.
Luego fue Volkswagen la que retiró a Ford del tercer peldaño del podium, y ahora es Hyundai/Kia quien se hace con su cuarto puesto. General Motors, a pesar de la que está cayendo, mantiene su puesto y está muy cerquita de Toyota. Según las cifras, Hyundai/Kia es el único grupo que no ha caído entre 2008 y 2009.
El resto ha sido gravedad. Ford ha caído un 30,60% debido a la crisis (fundamentalmente), hasta quedar 8.000 unidades por debajo del consorcio coreano. El año todavía no ha terminado, pero desde luego en Ford tienen motivos para preocuparse, ¡ya son los quintos!
Hace 10 años, cuando las dos marcas coreanas se fusionaron, eran las decimoprimeras del escalafón (11º). Se han aprovechado de la globalización y han adaptado sus productos a los mercados, véase el caso de Europa. Anda que no se ha notado la diferencia entre productos orientados a mercado coreano y el nuestro.
No tenían la previsión de trepar tan rápido, pero la explicación viene en forma de puñal hacia la marca del óvalo: “Hemos fabricado el producto correcto para los tiempos actuales”. Hoy día el grupo coreano tiene fábricas en Zilina (Eslovaquia), Estados Unidos y China, además del centro de producto en Alemania.
En resumen, no queda otra que reconocer el esfuerzo y tenacidad de los coreanos, cuyos productos empezaron siendo percibidos como de mala calidad o elementales (no se habían diseñado para el gusto europeo) y ahora pueden toser a los grandes en términos de calidad, fiabilidad, variedad… y también volumen.
Posdata: Sé de alguien que está agitando frenéticamente su varilla del cárter.
Fuente | Automotive News 2008 Global Data Book, Reuters
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