Europa ya tiene un plan B al gas que venía de Rusia antes de que Putin cortase el grifo. La solución es un gasoducto que transporte el gas desde España hasta el resto de Europa a través de Francia, pero no se trata del famoso MidCAT.
Finalmente, el proyecto MidCATno ha llegado a buen puerto, pero España, Portugal y Francia han llegado a un acuerdo para crear el Corredor de Energía Verde. En esencia, esta infraestructura servirá para llevar a cabo la idea del MidCat, pero cuenta con el beneplácito de Macron.
España se sale con la suya, pero Francia también
En 2013 se proyectó un gasoducto que serviría para llevar gas desde España hasta el resto de Europa a través de unas tuberías que conectarían Cataluña con Francia. El objetivo era aprovechar las conexiones de gas entre Argelia y España, así como la capacidad de regasificación de nuestro país para suministrar energía a toda Europa.
Las obras se paralizaron en 2019, en buena medida por las fricciones con Francia por motivos de presupuesto. Sin embargo, con el estallido de la guerra de Ucrania y la crisis energética derivada del conflicto armado, España y Alemania propusieron retomar la construcción del MidCAT como solución al corte de suministro de gas ruso. Pero Francia se negó.
Unas semanas después del no rotundo del Presidente de Francia, Emmanuel Macron, al MidCAT, hay un nuevo giro de los acontecimientos. España, Portugal y Francia han llegado a un acuerdo y habrá un gasoducto que conecte Cataluña con el país vecino para suministrar gas al resto de Europa, especialmente a Alemania y a los países del norte.
En lugar del MidCAT, que está parcialmente construido, habrá un nuevo proyecto que se denominará Corredor de Energía Verde para el que se creará una infraestructura completamente nueva y sustituirá al MidCAT.
De momento no se han anunciado muchos detalles de este gasoducto. Después de cerrar el acuerdo con Macron y Antonio Costa, Primer Ministro portugués, el Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha señalado que este corredor conectará a la Península Ibérica con el mercado energético europeo a través a través de Barcelona y Marsella (BarMar).
Según Sánchez, este proyecto tiene como objetivo transportar hidrógeno verde, pero “también, durante la transición, para el gas que necesite el mercado energético europeo”. Es de suponer que la transición a la que se refiere Pedro Sánchez hace referencia al cambio de paradigma energético que supone pasar del gas al hidrógeno verde.
Y es que el hidrógeno ha sido clave para cerrar este acuerdo. En España ya hay proyectos para producir hidrógeno verde, como el de Cummins en Guadalajara que se ha anunciado en los últimos días.
Pero Francia también puede sacar mucho partido de este nuevo gasoducto con capacidad para transportar hidrógeno verde. El país vecino puede completar el suministro de energía al mercado europeo con su propio hidrógeno.
No hay que olvidar que en Francia hay múltiples centrales nucleares, algunas de ellas con varios reactores (56 en total) y cada uno tiene capacidad para producir 500.000 MWh al mes. El hidrógeno libre de emisiones es muy fácil de hacer cuando tienes esa capacidad energética.
El proyecto seguirá tomando forma a lo largo de las próximas semanas, cuando los responsables políticos de España, Portugal y Francia vuelvan a reunirse para concretar los detalles y poner fecha de inicio para la construcción de la nueva infraestructura.
