Matricular un coche de segunda mano de la UE no es una misión imposible, pero te lo tendrás que currar

Matricular un coche de segunda mano de la UE no es una misión imposible, pero te lo tendrás que currar
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En el mercado europeo también podemos encontrar grandes ofertas de coches de ocasión o de segunda mano, con el único impedimento de tener que llevarlo a España y tener que hacer toda la burocracia para poder matricularlo en nuestro país.

Siempre que el coche esté homologado por la Unión Europea, este trámite no va a ser muy complejo y podremos conseguir la matrícula española para nuestro nuevo coche sin mucha dificultad.

¿El vehículo está homologado en la Unión Europea?

Coche Roma

Lo primero de todo que hay que hacer es comprobar que el coche está homologado en la Unión Europea. Desde el año 2001 todos los coches que se comercializan en Europa tienen que tener un número que certifica que están homologados.

Para esto, debemos mirar en la placa en dónde está anotado el número de bastidor o número de chasis. Este dato puede estar en diferentes lugares del coche pero los más comunes son en los laterales de alguna de las puertas o en la parte más cercana a la luna delantera cuando se abre el capó de un coche.

Este dato que buscamos es la contraseña de homologación o certificado de conformidad, un código alfanumérico que empieza con la letra "e", seguida de un número del 1 al 27 (que corresponde a cada país de la Unión Europea, España es el 9) un asterisco y después más números. Este dato también aparece en la ficha técnica del vehículo. Si no dispone de esta homologación, los trámites son más complicados ya que tendremos que hacer una homologación individual.

Documentación necesaria

Coche Lisboa

La documentación que nos debe de dar el comprador es similar a la que debemos solicitar a alguien que nos venda el coche en España.

Es fundamental que existe un documento que certifique la compra de ese vehículo. Una factura en el caso de que nos lo haya vendido una empresa o un contrato de compra-venta en el caso de que haya sido un vendedor particular. Estos documentos deben de ser traducidos al español.

También es importante obtener la ficha técnica del vehículo (aunque esté emitida en el país de origen) y la tarjeta de inspección técnica ya que al estar matriculado en la U.E. debería de tenerla pasada (Si no la tiene pasada, no podremos desplazar el coche hasta nuestro país y deberemos hacerlo por otras vías).

Un documento que no es obligatorio que nos den, pero sí nos va a hacer falta a la hora de homologar el vehículo es el Certificado de Conformidad, del que hemos hablado en punto anterior y que homologa a los coches que se pueden comercializar en Europa. Si no nos pueden facilitar este certificado, se puede solicitar en un concesionario de la marca, con los pertinentes costes administrativos.

Llevar el coche hasta España

Frontera Espana Francia

Para llevar el coche hasta España se puede contratar una empresa de transporte con los costes adicionales que eso supone. La otra opción es llevarlo nosotros mismos hasta nuestro país.

Para ello será necesario solicitar una matrícula provisional (que es de color verde), que sirve para que el propietario de un vehículo que actualmente no está matriculado y desea usarlo en vía pública, pueda conducir mientras se tramita la matriculación definitiva.

Este trámite se puede realizar a través de la página de la DGT y tiene un coste de 20,40 euros. Para realizar este trámite, se necesita la ficha técnica del vehículo, el Certificado de Conformidad y el contrato de compra-venta (o en su defecto, la factura) traducido al español.

Una vez se tiene la matrícula verde, hay que contratar un seguro temporal. Las diferentes agencias de seguros ofrecen este servicio, pudiéndolo contratar por días.

Con todos estos trámites hechos, ya podemos conducir con nuestro nuevo coche hacia España.

El coche ya está en España y ahora, ¿qué?

M30 A1

Una vez que hemos llegado a casa, el objetivo es cambiar nuestra matrícula provisional verde por una matrícula definitiva española. Para ello debemos de tener los mismos documentos que cuando se solicitó la matrícula provisional: la ficha técnica del vehículo, el Certificado de Conformidad y el contrato de compra-venta (o en su defecto, la factura) traducido al español.

Con todos estos documentos, debemos de acudir a la ITV para acreditar que las características del coche se corresponden con las que vienen indicadas en la ficha técnica, además de pasar la revisión. Si superamos este trámite, se expedirá una Ficha Técnica en formato español.

Tras esto, debes ir a al ayuntamiento en donde tienes tu domicilio para pagar el impuesto de Circulación (el precio varía en función de cada ayuntamiento), pagar el impuesto de Matriculación de la Agencia Tributaria (que varía según el vehículo) y el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (cada Comunidad Autónoma lo gestiona de manera diferente).

Con los justificantes de pagos de estos impuestos, la nueva ficha técnica, la documentación original del vehículo y el contrato o factura de compraventa traducida podemos acudir a tráfico para tramitar la nueva matriculación. El coste del trámite es de 98,78 euros.

Una vez hayas finalizado con este trámite debes dirigirte a un centro autorizado de expedición de placas de matrícula con la documentación original del vehículo que te han facilitado en tráfico (no son válidas las fotocopias). Además, por temas de seguridad, te solicitarán el DNI, nombre, apellidos y dirección.

Y... ¡por fin! Tendremos nuestro coche 'extranjero' con matrícula española. No te olvides que, de momento, tienes un seguro provisional, hay que contratar uno nuevo.

Fotos | amira_a, hpgruesen, Mike Steele y Maarten Sepp

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