En diciembre de 2015, el último McLaren P1 salió de fábrica: así se ponía punto y final a este miembro de las Ultimate Series, un superdeportivo híbrido de armas tomar que fue de los primeros de su especie en recurrir a la hibridación. Pero en el horizonte ya se ve a su sucesor y todo apunta que también será también híbrido.
Al menos así lo habría confirmado Mike Flewitt, presidente ejecutivo de la firma de Woking, al medio británico Autocar, asegurando que la firma ya ha comenzado a trabajar en este nuevo integrante de McLaren Ultimate Series. Aunque para verlo habrá aún que esperar cuatro años: según Flewitt, su lanzamiento se estima para 2024.
Su nombre aún se desconoce, pero como su predecesor, se sumará a los efectivos de la familia más exclusiva del fabricante y que no ha dejado de crecer en los últimos años. Entre ellos encontramos al McLaren Elva, que fue desvelado a finales de 2019, así como el exclusivo Speedtail, también híbrido y de 1.050 CV totales, o el superlativo Senna.
En Woking los prefieren híbridos... por ahora
Si bien Flewitt confiesa a Autocar que aún no han anunciado la mecánica que equipará, deja bastante claro que no se tratará de un modelo de combustión pura como el Senna o el Elva. "Obviamente, y de cara al futuro, será o un híbrido o un eléctrico".
Y la balanza se inclina más a favor de la segunda posibilidad, porque los eléctricos, según el directivo, están todavía muy limitados por los tiempos de carga. "Pongamos por ejemplo el 765LT. Sabemos que muchos clientes lo van a llevar a circuito. Si fuese eléctrico, estaría unos 30 minutos en pista y el resto de tiempo enchufado, hasta el siguiente día. No suena muy convincente", señala el directivo.
Asimismo, Flewitt considera las mecánicas eléctricas le van muy bien a modelos más pequeños y convencionales, y no tanto a los superdeportivos. Y pese a que admite que modelos eléctricos puros anunciados como el Lotus Evija o el Pininfarina Battista son "increíbles", insistió a la publicación inglesa que "los compradores de McLaren se centran en algo más que números", refiriéndose a las cifras de aceleración o a la velocidad máxima.
A ello se suma que McLaren debería concebir una arquitectura específica para un modelo eléctrico, lo que resulta complicado para un fabricante como el de Woking: "Como fabricante de bajo volumen, nuestra estrategia se basa en una plataforma, por lo que podríamos necesitar una plataforma eléctrica pura para ciertos países y una plataforma híbrida para otros mercados o sectores".
De esta manera, y según estas declaraciones de Flewitt, el heredero del McLaren P1 parece que será seguramente híbrido. Así, es de esperar que combine el habitual propulsor central trasero, el ya conocido V8 de 4.0 litros, con uno eléctrico.
De hecho, el Speedtail integra precisamente esa configuración con el V8 biturbo llevado hasta los 756 CV y apoyado en un motor eléctrico de 312 CV. En lo que se refiere a la entrega, y teniendo en cuenta que modelos como el Senna o el Elva están en torno a los 800 CV, no sería descabellado que también superase los 1.000 CV de entrega. El P1 ya los rozaba, llegando a los 916 CV.
Sea como fuere, por el momento sólo resta esperar a tener más noticias de este nuevo retoño de Woking que tomará el testigo de un modelo que ya es histórico para la marca.
Las imágenes utilizadas para ilustrar este artículo corresponden al McLaren P1 y al McLaren Speedtail
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