Mercedes-Benz ya ha completado la vuelta al mundo con sus modelos de hidrógeno

Mercedes-Benz ya ha completado la vuelta al mundo con sus modelos de hidrógeno
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El pasado 1 de junio finalizó con éxito en Estútgart el F-Cell World Drive, la vuelta al mundo que han dado tres Mercedes-Benz Clase B F-Cell, pasando por cuatro continentes y 14 países (entre ellos España). Es la primera vez que se realiza una vuelta al mundo con vehículos eléctricos de pila de combustible de hidrógeno. El viaje duró 125 días en total, para conmemorar el 125 aniversario del nacimiento oficial del automóvil.

En los 70 días de conducción, cada uno de los Clase B eléctrico a hidrógeno ha hecho más de 30.000 km sin problemas mecánicos (aunque sí con un pequeño accidente en Kazajstán que involucró a uno de los protagonistas). Los tres coches no viajaron solos, partieron a finales de enero en una caravana de vehículos Mercedes, entre los que se encontraba una Sprinter que se encargaba del repostaje de hidrógeno, allí donde no había hidrogeneras disponibles.

La finalidad de este viaje ha sido triple: comprobar la fiabilidad y funcionamiento, bajo diferentes condiciones climáticas, de los coches eléctricos con pila de combustible de hidrógeno, dar a conocer el modelo Clase B F-Cell como una alternativa real y utilizable, y fomentar en los diferentes países por los que han pasado, la creación de una infraestructura de estaciones de repostaje de hidrógeno (hidrogeneras).

Mercedes-Benz-Clase-B-F-Cell-tech

El Mercedes-Benz Clase B F-Cell tiene un motor eléctrico de 100 kW (136 CV) y 290 Nm de par. La electricidad se almacena en una batería de iones de litio de 1,4 kWh de capacidad y es generada por una pila de combustible que se alimenta con hidrógeno, comprimido (a 700 bares de presión) en tres tanques bajo el piso del habitáculo (que almacenan unos 4 kg de hidrógeno). Tiene una autonomía de unos 400 km.

A día de hoy, en todo el mundo, solo hay 200 estaciones de repostaje de hidrógeno. Sirva como ejemplo decir que solo en Alemania, para que pudieran usarse los coches de hidrógeno de manera razonable (al menos para empezar) serían necesarias 1.000 hidrogeneras.

La furgoneta Mercedes-Benz Sprinter que llevaba hidrógeno para los Clase B (a modo de unidad cisterna), tuvo que ser utilizada para repostar 130 veces. Esta unidad móvil y el abastacemiento de hidrógeno fueron gracias a la cooperación de Linde Group AG.

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Mercedes compara esta aventura de hidrógeno con la de la pionera Bertha Benz, en el año 1888, cuando atravesó Alemania en una de las primeras carreras-azaña de larga distancia de la historia del automóvil (por aquel entonces con un coche de gasolina). En esos tiempos la gasolina no se encontraba tan fácilmente, y en más de una ocasión había que pasarse por una farmacia para adquirirla.

Al igual que la gasolina se generalizó, Mercedes tiene la esperanza de que el hidrógeno también lo haga con el tiempo. De todos modos no debemos olvidar una cosa: a día de hoy los coches eléctricos de pila de combustible de hidrógeno son más caros que los eléctricos (la pila de combustible emplea ciertos metales preciosos que encarecen su fabricación) y además son también menos eficientes que estos (lo que se traduce en un mayor consumo de energía, aproximadamente el doble).

En mi humilde opinión debe seguir trabajándose en los coches de hidrógeno, si de verdad quieren ser una alternativa que pueda generalizarse. Dado lo complicado de almacenar hidrógeno (ocupa mucho espacio) y si la densidad de las baterías aumenta (y con ello se consigue duplicar la autonomía de los coches eléctricos, algo que parece bastante factible) es probable que se ponga la situación algo más complicada para los de hidrógeno (aunque creo que no se deben dejar de lado, ya que en el futuro habrá que tener en cuenta varias tecnologías a la vez, y no solo una).

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Vía | Autoblog Fuente | Daimler (Mercedes-Benz) En Motorpasión Futuro | Vehículos eléctricos de pila de combustible de hidrógeno

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