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Durante décadas, la mayoría de usuarios han visto al coche como un simple medio de transporte: te lleva del punto A al B y poco más. Volvo está aprovechando las ventajas de la nueva era eléctrica para que esa concepción cambie radicalmente. Gracias a la carga bidireccional, un vehículo como el Volvo EX90 no solo se mueve, sino que también gestiona y comparte energía, convirtiéndose en un verdadero centro energético móvil.
Estamos ante un SUV eléctrico que va más allá de ser un consumidor de electricidad para moverse, se ha transformado en un activo funcional, capaz de proteger tu hogar, optimizar tu consumo, generar ahorro económico e incluso colaborar con la red eléctrica. Con el EX90, conducir ya no es solo desplazarse: es interactuar con tu entorno energético, cuidar de tu familia y participar en un sistema más sostenible.
De consumidor a generador: el cambio de paradigma
En los primeros años de existencia de los coches eléctricos han sido identificados como receptores pasivos de energía, y es que enchufarlos tenía como único sentido recargar su batería para que pudieran moverse. El Volvo EX90 rompe ese patrón. Su batería no solo almacena energía para el propio vehículo, sino que puede devolver electricidad a tu hogar, a la red eléctrica o a otros dispositivos.
La batería del Volvo EX90 no solo almacena energía para el propio vehículo, sino que puede devolver electricidad a tu hogar, a la red eléctrica o a otros dispositivos.
Esta capacidad transforma al coche en un activo energético, redefiniendo el concepto de propiedad. Ya no adquirimos un coche solo para método de transporte personal; compramos un compañero que puede ayudarnos a gestionar la energía de forma inteligente. La carga bidireccional convierte al EX90 en un punto estratégico dentro de un ecosistema de energía descentralizado, donde movilidad y sostenibilidad van de la mano.
Además, la tecnología de Volvo permite que esta funcionalidad sea sencilla e intuitiva: no hace falta ser ingeniero para usar tu coche como batería, lo único que necesitas es conectarlo a casa o a la red, y el sistema se encarga del resto.
Vehicle-to-Home (V2H): tu casa nunca más a oscuras
Uno de los usos más inmediatos y prácticos de la carga bidireccional es el Vehicle-to-Home (V2H). Esta función permite que el EX90 alimente directamente tu hogar, ofreciendo seguridad y confort en cualquier situación.
Con su batería de 111 kWh, el EX90 tiene capacidad suficiente para mantener encendida una vivienda media española durante varios días sin necesidad de la red eléctrica. Las luces, el frigorífico, la calefacción o incluso el router wifi pueden seguir funcionando durante un apagón prolongado. Una funcionalidad impensable con un coche convencional.
Puedes cargar la batería del EX90 durante las horas de menor coste eléctrico —por ejemplo, por la noche— y usar esa energía en los picos de precio diurno, reduciendo la factura eléctrica.
El V2H también ofrece beneficios económicos claros. Puedes cargar la batería del EX90 durante las horas de menor coste eléctrico —por ejemplo, por la noche— y usar esa energía en los picos de precio diurno, reduciendo la factura eléctrica y aprovechando al máximo cada kWh. En otras palabras, tu coche se convierte en una batería doméstica gigante y móvil, optimizando tu consumo y generando tranquilidad y ahorro.
Vehicle-to-Grid (V2G): el coche que sostiene la red
La visión de futuro del EX90 se hace aún más evidente con la función Vehicle-to-Grid (V2G). Esta tecnología permite que el coche devuelva energía a la red eléctrica en momentos de alta demanda, ayudando a estabilizarla y favoreciendo un suministro más sostenible.
Imagina un caluroso día de verano, con millones de aires acondicionados encendidos y la red eléctrica bajo presión. En ese momento, tu Volvo EX90 puede aportar parte de su energía, reduciendo la necesidad de recurrir a las plantas de energía convencionales.
Lo más interesante es que esta colaboración también puede ser rentable para el propietario. Cada kilovatio que tu coche devuelve a la red puede traducirse en una compensación económica, convirtiendo tu EX90 en un activo financiero y energético.
Si multiplicamos este efecto por cientos de EX90 conectados, se vislumbra un futuro donde los coches eléctricos se convierten en piezas clave de barrios inteligentes y sostenibles, capaces de equilibrar la demanda y garantizar energía para todos. Volvo, con esta tecnología, no solo fabrica coches, sino que impulsa la transición hacia un modelo energético más responsable y descentralizado.
Vehicle-to-Load (V2L): energía en cualquier parte
La carga bidireccional también tiene aplicaciones más tangibles y cotidianas gracias al modo Vehicle-to-Load (V2L). Con él, el EX90 puede suministrar energía a dispositivos externos, actuando como un enchufe portátil potente y versátil.
El V2L permite:
- En la ciudad: cargar tu bicicleta eléctrica en el garaje sin depender de la pared.
- En escapadas al campo: alimentar un equipo de camping completo, desde luces y nevera portátil hasta un proyector para cine bajo las estrellas.
- Entre amigos: prestar energía a otro vehículo que se haya quedado sin batería.
La potencia de salida del EX90 permite usar varios dispositivos simultáneamente, algo que ninguna batería portátil convencional puede ofrecer. Esto convierte al coche en una fuente de energía fiable y flexible, lista para adaptarse a cualquier estilo de vida. Con el EX90, tu energía ya no está limitada a un enchufe o a la red: te acompañará donde la necesites.
Por qué EX90 es diferente a una batería doméstica
Frente a soluciones fijas como la Tesla Powerwall o sistemas de baterías domésticas, el EX90 ofrece movilidad, capacidad y versatilidad. No solo almacena energía; la transporta y la pone a tu disposición allí donde sea necesaria.
Además, Volvo integra estas funciones de serie en el EX90, no como un extra futurista. Esto demuestra la apuesta de la marca por un futuro 100% eléctrico y neutral en carbono, alineado con su objetivo de ser climáticamente neutral para 2040.
Cada EX90 no es solo un SUV prémium; es una herramienta de sostenibilidad tangible que combina movilidad, confort y responsabilidad ambiental.
Cada EX90 no es solo un SUV prémium; es una herramienta de sostenibilidad tangible que combina movilidad, confort y responsabilidad ambiental.
Una nueva era con el Volvo EX90
Volvo EX90 inaugura un nuevo paradigma: el del coche como socio energético. Ya no es solo transporte; es un aliado que protege tu hogar, apoya a la red eléctrica y te acompaña en experiencias dentro y fuera de la ciudad.
Mirando al futuro, podemos imaginar vecindarios donde vehículos con esta tecnología se conecten entre sí y con la red, formando micro-redes inteligentes que optimizan la energía y aseguran suministro para todos. Cada coche se convierte en un nodo vital de un sistema sostenible, demostrando que la movilidad eléctrica puede ser transformadora a nivel personal y colectivo.
Con Volvo EX90, el futuro de la energía ya no está solo en las centrales eléctricas: está aparcado en tu garaje.
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