En los últimos meses se ha producido un 'baneo' total a los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), sobre todo a los patinetes eléctricos, en el transporte público español.
La Comunidad de Madrid ha acordado impedir provisionalmente el acceso de usuarios con estos vehículos a la red de transporte público de la región desde el 4 de noviembre. Y la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) del área de Barcelona ha decidido alargar de manera indefinida la prohibición de la entrada de patinetes eléctricos y otros al transporte público. Saltarse estas medidas tiene multa.
Cataluña. La multa por acceder al transporte público catalán (trenes de Rodalies, Regionales, el metro de Barcelona, buses urbanos e interurbanos y el tranvía de Barcelona) con un patinete eléctrico asciende a 200 euros una vez se formule la denuncia, aunque serán los propios operadores, ya sean privados o públicos, los que se encargarán de controlar a los viajeros. En un principio, pedirán al usuario de VMP que abandone el vagón a modo de advertencia.
Para el ente público, "la regulación aplicable a los VMP no aporta, a día de hoy, las suficientes garantías de seguridad para permitir su presencia al transporte público", explica la ATM.
Madrid. Desde el 4 de noviembre se prohíbe la entrada de patinetes eléctricos en Metro de Madrid, EMT de Madrid, autobuses interurbanos y urbanos, metros ligeros e incluso intercambiadores. También Renfe veta su entrada desde el 12 de diciembre en todo el territorio.
Las consecuencias de incumplir esta medida van desde la expulsión del medio de transporte correspondiente hasta sanciones de entre 100 y 200 euros, según explica el Consorcio de Transportes de Madrid.
El peligro de una batería, sea de un patinete o una bici
Una serie de aparatosas explosiones en el transporte público de Madrid y Barcelona han llevado a esta situación. El principal temor es que cualquier fallo o mal uso de la batería provoque una explosión que cause no solo daños materiales, si no personales.
📷 #IMÁGENES Sólo daños materiales y sin heridos. El último vagón de la línea 2 de @metro_madrid quedó destrozado tras explotar la batería de un patinete eléctrico. Estas son las imágenes 👉 https://t.co/KtdGNf9SbI pic.twitter.com/4tCDDIzBcx
— Telemadrid (@telemadrid) October 18, 2023
El Comité de Coordinación de Emergencias del Transporte Público de la ATM ha investigado acerca del llamado embalamiento térmico, principal responsable de las explosiones.
Se trata de un proceso de degradación extremadamente rápido en el cual se cataliza toda una serie de reacciones químicas exotérmicas que generan fuego, humo, emisión de gases, fragmentación y explosión. Además, los estudios hechos también concluyen que el riesgo de producirse este fenómeno se puede incrementar cuando la batería que alimenta el VMP se ve sometida a condiciones de manipulación del software, sobrecarga o sobredescarga de la batería o daños físicos, vinculados a la posición de la batería a la parte inferior de la plataforma, detalla el Comité.
Un problema que también está afectado a las bicis eléctricas: en Nueva York, han muerto casi 17 personas en lo que va de año debido a esto, y se han contabilizado 238 incendios de baterías de bicis o patinetes eléctricos. Y no solo en EEUU: en los últimos cuatro años, en Reino Unido bicicletas y patinetes combustionando ya se han cobrado ocho fallecidos y dejado cerca de 200 heridos en un total de 565 incendios.
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