Ya se ha revelado en Estocolmo el esperado nuevo Volvo EX90: un SUV eléctrico de siete plazas que lejos de ser el sucesor natural del XC90, como nos ha especificado la marca, convivirá a su llegada con el buque insignia del fabricante sueco.
Viene cargado hasta los topes de tecnología, incorpora gran cantidad de materiales reciclados en su fabricación y está equipado con lo último en materia de conectividad y seguridad. Además, promete hasta 600 km de autonomía y tendrá carga bidireccional.
Un antes y un después en la filosofía de la marca sueca
En cuanto a diseño exterior, salta a la vista que el nuevo Volvo EX90 (que deriva del Volvo Recharge Concept) guarda ciertas reminiscencias tanto al Volvo C40, primer crossover eléctrico de la marca, como al XC40, SUV eléctrico, compacto y más urbanita.
Sin embargo el nuevo SUV eléctrico de gran tamaño no solo es más aerodinámico (Cx de 0,29), sino que será más grande que sus hermanos y más lujoso, por lo que apuntará directamente a rivales de la talla del nuevo Audi Q8 e-tron o el Polestar 3, con el que comparte tecnología.
A diferencia de los primeros eléctricos de la marca, que se basan en la plataforma mixta CMA, el EX90 será el primer Volvo en acoger la nueva arquitectura SPA2. Esta, aunque admite mecánicas de todo tipo (bloques térmicos, hibridación enchufable y 100 % eléctrica) está especialmente optimizada para la propulsión eléctrica.
En este sentido Volvo ha confirmado que el nuevo Volvo EX90 contará inicialmente con dos versiones: una de 408 CV y otra de 517 CV. Ambas se alimentarán de una batería de iones de litio de 111 kWh de capacidad bruta (107 kWh de capacidad neta).
La que por el momento será la versión de acceso contará con dos motores (uno en cada eje) que alcanzan una potencia de 300 kW (408 CV) y tendrá tracción total. Esta versión, que promete una autonomía de 600 km en ciclo WLTP con una sola carga, podrá recargar del 10 al 80 % de la batería en menos de 30 minutos, según Volvo.
La versión más prestacional también contará con dos motores eléctricos que alcanzan los 380 kW (517 CV) de potencia, 910 Nm de par motor y tracción total. En este caso, la marca aún no ha dado detalles técnicos como los relativos a su autonomía.
Todo un escaparate tecnológico con ruedas
En las primeras imágenes del elegante interior del modelo reveladas por la marca, se puede apreciar el salto que representa este EX90 respecto a modelos anteriores, con un diseño muy moderno y minimalista marcado por la sencillez y las líneas limpias.
Volvo afirma que en la fabricación de cada coche se han incorporado hasta 48 kg de materiales reciclados (alrededor del 15 % del total del plástico). Además, se ha empleado un 15 % de acero y un 25 % de aluminio reciclado tanto en el chasis como en la carrocería.
Las protagonistas indiscutibles en el habitáculo son la gran pantalla central de 14,5 pulgadas y la que hace las veces de cuadro de instrumentos, aunque también llama la atención el contraste de texturas y cómo se integran elementos como las salidas de aire.
Solo vemos un mando para controlar el sistema de infoentretenimiento, que es redondo, está acabado en cristal y colocado en posición estratégica.
El Volvo EX90 despunta a nivel de desarrollo de hardware pues, entre otras cosas, integra la última generación de procesadores Snapdragon de Qualcomm para una potencia de cálculo ultrarrápida.
Esto le permite desplegar todas las capacidades de visualización de Unreal Engine 5 (una herramienta creada por el desarrollador de juegos Epic Games responsables, entre otros, del popular Fortnite). Pero también se traduce por ejemplo en gráficos de calidad superior en todas las pantallas y el Head-up Display.
También incorporará otras chucherías como un sistema de audio Bowers & Wilkins con Dolby Atmos (primicia en Volvo) y altavoces integrados en los reposacabezas.
Y además de tener servicios de Google integrados como Google Assistant, navegador con Google Maps o la posibilidad de descargar más aplicaciones desde Google Play, que según la marca de cara al usuario "hace que el coche sea prácticamente igual de cómodo que un segundo móvil", también dispone de conectividad 5G y será compatible con Apple CarPlay inalámbrico y Android Auto.
En el apartado de seguridad, el Volvo EX90 incluye un despliegue masivo de asistentes de nueva generación con los que se convertirá “en el Volvo más seguro de la historia” según el fabricante.
Entre otros, incorpora múltiples sensores y un LIDAR situado sobre el parabrisas delantero, que combinados con las plataformas Xavier y un potente superordenador Nvidia Drive con Inteligencia Artificial, obtienen una visión 360 grados en tiempo real del entorno del vehículo.
El coche será capaz de detectar incluso pequeños objetos en la carretera de día o de noche a cientos de metros de distancia. Incluso circulando a alta velocidad, también asegura poder detectar a peatones con una distancia de hasta 250 metros.
En lo relacionado con el Pilot Assist, incorpora nuevas funciones como el cambio automático de carril. Asimismo, se ha mejorado el sistema de detección de fatiga del conductor.
Hemos hablado con la marca y Volvo asegura que el coche ya tiene el hardware necesario para incorporar la conducción autónoma de nivel 3. De cara a un futuro próximo, se podrá implementar todo lo relativo al software necesario (y se podrá ir actualizando vía Internet).
Su desembarco en los principales mercados no se espera hasta bien entrado 2023. Concretamente en España se pondrá a la venta en el primer trimestre de 2023, aunque las primeras unidades no llegarán a sus dueños hasta finales de año.
Para ello, el coche empezará a fabricarse de forma inminente en la planta de Ridgeville, en Carolina del Sur (EEUU). Más adelante, también se fabricará en China. En ambos casos, Volvo ha anunciado que su producción será neutra en emisiones de carbono.
En línea con el objetivo de contar con una gama de coches 100 % eléctricos para 2030, al nuevo buque insignia de la marca le seguirá un nuevo coche eléctrico cada año durante los próximos ocho años.
Respecto a la comercialización, como sucede con Polestar, el nuevo SUV eléctrico de Volvo estará disponible tanto de forma tradicional como a través de Internet.
Y es que aunque los concesionarios de la marca no vayan a desaparecer, adoptarán un papel más enfocado a la atención personalizada de los clientes (asesoramiento, servicio postventa y servicio técnico).
