Mansory le ha vuelto a meter mano al Bentley Continental GT, en este caso a la versión más potente, la Speed. Así ha creado el Vitesse Rosé. ¿Y este nombre? Vitesse es velocidad en francés. Rosé salta a la vista, el color principal de la carrocería y el habitáculo.
Aunque sólo se fabricarán tres unidades, Kourosh Mansory, propietario de la compañía tal vez no se bienvenido en las principales marcas de coches británicas. Es el especialista en convertir la elegancia de sus coches en extravagancias para adinerados multimillonarios.
El Mansory Vitesse Rosé será presentado en el Salón de Fráncfort y sin duda no pasará desapercibido. Además de su llamativo color, se han modificado los faldones delanteros y traseros, que ahora tienen un aspecto más aerodinámico en línea con los faldones laterales. También se le han puesto luces diurnas de LED en el frontal.
El motor de doce cilíndros cambia completamente su sonido debido a los escapes, que pasan de ser ovalados a ser dos salidas rectangulares, como si se tratase de un ladrillo.
El capó está ahora fabricado en fibra de carbono, igual que el pequeño alerón trasero y otra pieza que ensambla la luneta trasera con el maletero.
Las llantas son de 21 pulgadas y según Mansory suponen un importante ahorro de peso respecto a las originales, con la consiguiente mejoría dinámica. Van calzadas con neumáticos Dunlop Sport Maxx GT en medida 285/30 ZR 21.
El habitáculo está en línea con el exterior, ya que las pieles nobles, maderas y piezas de aluminio que llevan de serie los Bentley Contiental GT han desaparecido para dejar paso a pieles rosas que se combinan con más piezas de fibra de carbono.
Hasta el motor recibe el color rosa del resto de la carrocería. Sin duda una extravagancia más en el mundo de los coches, pero me juego un dedo a que esas tres unidades o están ya vendidas o ya tienen a tres personas detrás de ellas.
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