Introducción a las tandas en circuito: la primera vez

Introducción a las tandas en circuito: la primera vez
83 comentarios

En más de una ocasión me han preguntado qué hay que tener en cuenta antes de meter nuestro coche en circuito. Pues bien, creo que ya es hora de hacer algo al respecto. Esta guía se refiere a nuestro coche, no de uno que una organización nos alquile o preste. Vamos a ver qué es eso de las tandas o track day.

La conducción en circuito es radicalmente distinta a la que se hace sobre carreteras públicas. Eliminamos casi por completo la posibilidad de chocar de frente al haber un único sentido, tenemos un agarre superior (en seco y en mojado), las posibilidades de equivocarse sin consecuencias son superiores, etc.

No obstante, la mayoría de los coches de calle se quedan muy cortos en circuito, y muchos conductores también. Es un lugar idóneo para comprobar dónde están nuestros límites como conductores, pues en caso de error, es más difícil que nos hagamos daño o destrocemos el coche.

Volkswagen Scirocco

Dicho de otra forma, en circuito nos enteraremos más rápido que no tenemos ni idea de conducir (para aquellos que todavía no lo saben). Esto no tiene nada que ver con ir a 200 km/h por una autopista vacía, y tampoco es como subir un puerto de montaña deprisa. Aquí se amplifica todo.

Como el asfalto, por lo general, dispone de un ancho más generoso, se pueden apurar más las trazadas y las frenadas, el margen es superior. En una carretera normal tenemos uno o dos carriles de margen, y más allá del arcén suele haber una delgada línea roja entre un susto de muerte o un buen leñazo.

Lo que hay que tener en cuenta ante todo es que vamos a someter a nuestro coche y a sus elementos mecánicos a un maltrato considerable, de ahí la importancia de una puesta a punto previa y de una serie de consejos imprescindibles dentro y fuera de pista para que nuestro coche no se vaya en la grúa.

Honda Civic
La conducción en circuito maximiza las exigencias a mecánica y chasis

Preparando nuestro coche

Para empezar, es recomendable acudir a la cita con el depósito bien lleno, porque el consumo de combustible es brutal, de 20 l/100 km hacia arriba y eso con coches muy normalitos. Si llegas a 30 l/100 km no te asustes, no te has convertido en norteamericano ni tienes un agujero en el depósito, es lo que hay.

A menos que el coche esté nuevecito, es recomendable hacer una revisión pre-ITV o similar para comprobar que todo está en orden: nivel del aceite, pastillas de freno, amortiguadores, neumáticos, estado de los limpiaparabrisas (si puede llover), etc. No quieres que se rompa tu coche en medio del fregao, ¿verdad?

Sobre los neumáticos, aquí es importante saber que van a sufrir un desgaste muy elevado. Unos neumáticos nuevos pueden durarte un día si vas con el cuchillo entre los dientes. Lo de ir a pista con ruedas muy usadas o a punto de cambiar… ni se te ocurra. Es buena idea contar con un presupuesto de emergencia por si hay que cambiarlas al salir del circuito.

Renault Mégane RS
Todos los coches de calle se acaban quedando cortos en circuito al límite

Sobre las presiones de los neumáticos, hay tres opciones: bajar, las de serie, o subir. Si bajamos un poco la presión (hablo de décimas) optimizaremos el agarre pero tendremos mucho más desgaste. Si subimos la presión un poco, las ruedas tendrán más vida útil, pero será más seco de suspensión y no irán a tope de adherencia.

La suspensión es deseable que esté en buen estado. Si los amortiguadores están cerca de la jubilación será más difícil controlar el coche en una situación límite, cosa fácil de alcanzar en pista. Si todo está en buen estado, mejor, y si llevas suspensiones más deportivas, mejor aún, pero eso último aviso que es caro.

Frenos… gastarás frenos. Grábate a fuego lo siguiente: no se usa el freno de mano tras estar en pista, y tampoco olvides que en la última vuelta se debe rodar despacio para que los frenos bajen de temperatura y de paso evites alabear los discos de freno. Inmoviliza el coche en una superficie plana.

Circuito del Jarama
Trazada ideal: del exterior al interior hasta el vértice, y al exterior de nuevo

Nociones básicas de conducción en circuito

La trazada no es como en una carretera pública (seguir el carril), sino que lo óptimo es empezar a tomar una curva por el lado exterior, tocar el vértice interior y aflojar volante hasta ir de nuevo al vértice exterior. En todo momento debes vigilar los retrovisores, especialmente si en pista hay más gente.

Debes seguir una progresión, de menos a mas, de forma que vayas cómodo y no oigas los neumáticos chirriar. Poco a poco puedes aumentar el ritmo, pero no te hagas un pique contra un Ayrton Senna imaginario que esto no es el Gran Turismo. Siempre deja un margen para el error, lo fácil es cometer uno.

No recomiendo desconectar el control de estabilidad si no se sabe lo que se está haciendo. Los conductores más experimentados pueden desconectarlo o relajarlo, pero han de saber responder a una situación peligrosa pues la electrónica ya no estará ahí, salvo en modelos donde se vuelven a activar las ayudas solas.

Conducción en circuito
IMPORTANTE: Mirar siempre a la salida de la curva, no hacia delante

Las leyes físicas siempre están ahí

Si la velocidad de entrada a una curva es excesiva, sufriremos el subviraje, el coche gira menos de lo esperado y es muy frecuente en coches de tracción delantera. Hay que aflojar volante suavemente y pisar el freno con suavidad. Pisar a fondo y doblar la dirección es sinónimo de continuar en línea recta.

Si hemos entrado en una curva con mucha dirección o hemos provocado un cambio de pesos violento, podemos sufrir un sobreviraje, el maletero intenta adelantar al morro. Hay que girar la dirección al lado del derrape, es decir, si el maletero se va por la izquierda, hay que girar a la izquierda, y tratar de mantener la velocidad o acelerar un poco. ¡No frenes violentamente!

Si tienes una pérdida de control de las cuatro ruedas, lo más inteligente es pisar el freno a ver si consigues dirección, y rezar para no golpearte. Hacer el stuntman y tirar de freno de mano puede ser la guinda al pastel llamado estupidez. Las escapatorias están para eso. Son las consecuencias de ser niño malo.

Chevrolet Corvette C6
Hasta los deportivos más caros necesitan aflojar ritmo en la última vuelta

Como los frenos estarán sometidos a un esfuerzo fuera de lo normal, puede que empieces a notar un olor extraño o que ha que pisar más el pedal para conseguir la misma frenada. Es un aviso, hay que relajar el ritmo, las pastillas se están calentando mucho y el líquido de freno pierde propiedades. Si insistes, perderás importante capacidad de frenada.

Vigila la temperatura del agua, normalmente no la verás fuera de lo normal, pero es posible que la refrigeración de serie se quede corta. Si sube más de lo normal, afloja el ritmo, apura menos las revoluciones y baja la velocidad punta. Por cierto, lo más fácil es que no puedas coger todo lo que da el coche, no suele haber espacio suficiente.

Los retrovisores míralos SIEMPRE. Se te puede adelantar por la izquierda o por la derecha indistintamente. Si vas a adelantar tú, es un detalle de cortesía indicar por los intermitentes dónde vas a pasar, e incluso dar un par de ráfagas. Por si acaso, plantéate que quien vas a adelantar puede no haberte visto, ¡como en la carretera pública!

Alfa Romeo 159
Conduciendo en mojado deben extremarse todas las precauciones

Despacito y con buena nota al principio

Sobre velocidad, solo suele haber limitación dentro de la zona de boxes, fuera no. A la hora de entrar en una curva, antes de iniciar el giro, ya hay que llevar la velocidad adecuada. Frenar en la primera mitad de la curva no es buena idea. Se empieza a acelerar pasado el vértice de la curva, según se va apurando hacia el exterior, y no antes.

Los que no tengan ABS, deben tener el doble de cuidado, y evitar el bloqueo de ruedas, ¡especialmente en mojado! Y los que llevan ABS, que no subestimen a la física, que una curva no es la misma curva si está empapada, y cuando los neumáticos superan sus límites, te vas fuera, aunque lleves todas las siglas del Larousse.

Cuando empieza a llover, ponte alerta. La combinación de goma en el asfalto y agua, con la suciedad ambiental, convierte la pista en hielo líquido. Amplía tus márgenes, distancias de seguridad, adelanta las frenadas y evita el uso abusivo de los frenos o la dirección, porque la adherencia disponible desciende mucho.

Toyota Supra
Cuando uno conduce SU propio coche, más razón aún para cuidarlo

En la última vuelta antes de salir, conduce con mucha suavidad, no solo los frenos deben refrigerarse, también el aceite del motor, el refrigerante y los que lleven turbo, el mismo. Un turbocompresor a plena carga gira a 250.000 RPM o más, más de 150 por segundo. Déjale que se refrigere o puede gripar el turbo y tus finanzas.

Una vez esté el coche parado, si es turbo, déjalo encendido por lo menos un par de minutos. Nada de freno de mano. Si los electroventiladores se ponen a funcionar como locos, es normal. Cuanto más combustible se ha fundido, más calor se ha generado, y hay que deshacerse de él. Parado, el coche no respira aire fresco.

Cómo no, hay que seguir al pie de la letra las instrucciones de los comisarios y organizadores, y tener claro qué significa cada bandera. Algunas normas nos pueden parecer estúpidas, pero incluso un piloto experimentado puede sufrir un accidente dentro de boxes o en pista. Recordatorio breve: no eres un piloto experimentado.

Ford Mustang Mach 1
A los mayores, un respeto. Si queremos que nos duren…

En definitiva, se trata de ir a divertirse y a pasarlo bien, no a demostrar nuestras habilidades de pilotos. En especial la primera vez, pórtate bien, unas tandas de las que sobrevive íntegro el coche y el conductor han sido satisfactorias. Ya habrá otras ocasiones para progresar más.

El sentido común nos dice que llevemos el coche lo más aligerado de cosas sueltas, peluches, herramientas, gafas de sol… con tanto meneo, más de una cosa puede salir volando y romperse o hacernos daño. Si tienes un casco, no es tontería llevarlo, y el cinturón de seguridad no admite discusión alguna.

Antes de volver a la carretera, comprueba el estado de los neumáticos. Si se han degradado lo suficiente como para no ser seguros para circular, tendrás que ir al primer taller que puedas a poner ruedas nuevas. El que avisa no es traidor. No es cuestión de ahorrarse solo una multa, sino de llegar enterito a casa.

Llegados hasta aquí, mi sincero deseo de que disfrutes de la experiencia y que te lo pases muy bien, ¡pero con cabeza!

Vuelta extra

Me vais a permitir dejaros este vídeo de las vueltas más divertidas que hice en mi primer día de tandas con mi propio cacharro. Disculpad el balanceo, todavía no le había puesto amortiguadores nuevos. Sé que a lo mejor no os transmitirá lo mismo, pero se me ponen los pelos de punta cada vez que lo veo.

Vídeo | Youtube

Temas
Comentarios cerrados