El "factor cabreo", o cómo una sola marca está intentando salvarnos de la sobredosis de pantallas táctiles

El "factor cabreo", o cómo una sola marca está intentando salvarnos de la sobredosis de pantallas táctiles
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Hoy en día no es fácil encontrar un coche nuevo que tenga botones físicos para manejar los distintos menús: en muchos casos los echamos de menos incluso para acceder a las funcionalidades básicas, como regular la temperatura o los espejos. Y para muestra Mercedes-Benz, que apuesta por pantallas cada vez más grandes aunque sean menos seguras.

Por suerte, ni organismos como Euro NCAP, ni todas las marcas creen que el futuro de la automoción deba rendirse a la digitalización y las pantallas que lo copan todo. Un ejemplo es Volkswagen, aunque sea parcialmente “y a la fuerza”, pero si hay una marca de coches que apueste fuerte por los botones de toda la vida sin duda es Aston Martin.

Los interiores de Aston Martin apuestan por los botones físicos, la sencillez y la elegancia

El fabricante británico Aston Martin quiere que sus interiores sean lo más seguros y sencillos posible, y que los controles de sus coches sean fáciles de usar para no frustrar a sus clientes. De hecho, la marca premium tiene tan en cuenta la opinión de sus clientes que sus diseñadores ajustan el habitáculo de sus coches según “el factor cabreo”: si un botón, interruptor o control táctil molesta, se suprime.

La tendencia actual de integrar cada vez más funciones del coche en los avanzados sistemas de información y entretenimiento con pantalla táctil, en ocasiones, puede llevar a tener que bucear por múltiples submenús para algo tan sencillo como ajustar la temperatura. Y aunque Tesla no sea la única marca en centralizarlo casi todo en sus pantallas, sí es una de las que inició la moda que después han seguido otros fabricantes.

Otros como Bugatti o Aston Martin no quieren saber nada del tema. “Lo más importante para nosotros es entender cómo integrar la tecnología en un habitáculo, y nos fijamos en Tesla, que ha sido pionera”, explica a CarExpert el director de diseño de la marca, Miles Nurnberger, quien explica que cuando vieron por primera vez un interior de la marca californiana, dijeron abiertamente: “Nosotros no somos así”.

Botones Aston Martin 2

“Somos una marca que viene del mundo de la tactilidad, de la interfaz sensorial”, remarca. “Pero todos tenemos un teléfono en el bolsillo. A todos nos encantan, son geniales, somos adictos a ellos. ¿Cómo unir los dos mundos?” Nurnberger explica que, para responder a esa pregunta y decidir cómo implementar la tecnología y las pantallas en sus coches, decidieron que los diseñadores tenían que salir a probar varios Aston Martin.

Así, estos utilizaban sus diferentes sistemas e iban anotando todos los pasos necesarios para activar determinadas funciones. Cualquier función que se esperaba que estuviera disponible de inmediato y no lo estuviera desencadenó lo que ellos mismos han bautizado como "el factor cabreo". El resultado salta a la vista en el flamante nuevo Aston Martin Vantage.

Este gran ejemplo de filosofía de diseño de la marca tiene una pantalla táctil, pero está acompañada de muchos botones físicos, interruptores y mandos. Nurnberger comenta en la entrevista que Aston Martin consideró trasladar los controles de los asientos a la pantalla táctil, por aligerar peso y crear un diseño mas limpio.

Mercedes
Interior de Mercedes-Benz

Pero algunos conductores comentaron al respecto que “les gusta ajustar su asiento sobre la marcha”, dependiendo de su forma de conducir, y mover estos ajustes a la pantalla táctil habría sido engorroso e inseguro. “Lo mismo puede decirse del volumen y la climatización”. Así, para evitar desencadenar “el factor cabreo”, se quedaron donde están.

Es lo que tiene el factor cabreo. “Cuando lo quieres, lo quieres al instante”, dice Nurnberger. “Si quieres subir o bajar el volumen o la temperatura, en el momento en que tienes que entrar en una pantalla y pulsar la temperatura, has perdido al cliente. Has perdido la experiencia”. Así, una ergonomía más inteligente y una tecnología más moderna y fácil de usar forman parte de la renovada atención que Aston Martin presta al diseño de interiores.

Lo cierto es que las pantallas táctiles requieren más concentración para su uso, lo que en ocasiones puede resultar frustrante e incluso peligroso. La propuesta de Aston Martin es simple, lógica y equilibrada, y quizá debería ser adoptada por toda la industria, especialmente por las marcas que comercializan vehículos asequibles para la mayoría. Es probable Euro NCAP les dé el impulso necesario de cara a 2026 en forma de normativa.

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