
Quizá algunos recuerden una de esas polémicas políticas un tanto absurdas que fue tendencia en España durante unos pocos días hasta que otra cosa la opacó. El desértico aeropuerto de Castellón, un Mercedes de carreras y un joven piloto español haciendo un test que casi nadie conocía. Lo que algunos no saben es que ese piloto llegó a Fórmula 1.
Ese piloto era Roberto Merhi y, aunque muchos no lo recuerdan, estuvo en la parrilla de la categoría reina hace ahora una década. Corrió con un humilde Manor en la temporada 2015, y ni siquiera en todas las carreras, y a día de hoy sigue involucrado en el mundo de la Fórmula 1 ayudando a otro piloto español.
Merhi fue probador de Caterham y corrió trece carreras en 2015 con Manor
La última vez que hubo tres pilotos españoles compartiendo pista en una carrera de Fórmula 1 fue en 2015. Fernando Alonso ya era una leyenda que acababa de fichar por McLaren-Honda, mientras que Carlos Sainz estaba debutando en la Fórmula 1. Pero junto a ellos había un tercero: Roberto Merhi. Y casi nadie se acuerda de él.
Sin demasiados apoyos económicos, Merhi llegó a la Fórmula 1 a base de puro talento. En sus paso por las categorías inferiores fue subcampeón de la Fórmula Renault 2.0, ganó la Fórmula 3 Euroseries y le peleó a Sainz el título de la Renault 3.5 hasta la última carrera. Pero sí, su gran salto a la fama fue con aquel test en el aeropuerto de Castellón.
Con 21 años, Merhi se vio en mitad de una batalla política que copó toda la actualidad mediática de España durante unos días por la polémica en torno a un aeropuerto de Castellón por el que se habían visto pocos aviones desde su apertura. Por cierto, el test fue pagado por Mercedes para probar su DTM, donde corría Merhi.
La gran mayoría de los españoles no volvieron a saber nada de Merhi. Ni siquiera que aquel piloto que entrenaba en el aeropuerto de Castellón acabó llegando a la Fórmula 1, casi de rebote. Fue en 2014, cuando el humilde equipo Caterham le dio la oportunidad de ejercer de probador y participar en tres entrenamientos libres.
Merhi se subió al Caterham en Monza, Suzuka y Sochi, en gran parte gracias a su buena relación con Colin Kolles, el patrón de un equipo que ya estaba al borde de la quiebra y que se dedicaba a darle oportunidades a quien creía que las merecía, sin más miramientos. Efectivamente, Caterham desapareció a finales de 2014.
Era un sueño cumplido solo a medias. Sí, Merhi había corrido en Fórmula 1, pero no en una carrera. Y entonces apareció Manor. Otro equipo al borde de la quiebra que surgió de los restos de Marussia. La pequeña escudería británica se montó deprisa y corriendo para llegar a la primera carrera y le dieron el asiento a Merhi.
Manor buscaba un piloto de pago que les ayudase con las facturas, pero como no lo encontraron, escogieron a Merhi. No fue confirmado hasta la misma semana del Gran Premio de Australia, y con dos condiciones claras: su coche sería poco menos que el de repuesto de Will Stevens, que sí pagaba, y cuando apareciese un piloto de pago pasa su asiento, adiós Merhi.
Merhi ni siquiera pudo salir a pista a la carrera de Australia, pero sí que lo hizo en Malasia, debutando por fin en Fórmula 1 de verdad. Llegó a correr trece carreras ese año, sin grandes resultados, ya que el coche era de largo el peor de la parrilla. Lo mejor fue un duodécimo puesto en Silverstone, en lluvia. La especialidad de la casa.
No fueron más carreras porque, efectivamente, el piloto de pago apareció. Fue Alexander Rossi, un estadounidense que durante un breve espacio de tiempo fue la gran esperanza de la Fórmula 1 para volver a tener un piloto de las barras y estrellas en la pista. Tras salir de la Fórmula 1, Merhi ha estado en el WEC, en Fórmula E y ha tenido apariciones hasta en Fórmula 2.
Pero ver a Merhi por el paddock de la Fórmula 1 sigue siendo habitual hoy en día. Porque el castellonense es la mano derecha de Carlos Sainz en el paddock, y le acompaña a muchos circuitos a echarle una mano, además de haber hecho labores de simulador para varios equipos. Roberto Merhi, el español olvidado de la Fórmula 1.
Imágenes | Caterham, Manor F1, Ferrari