Peter Sauber: la adaptación de Pedro de la Rosa está siendo más exigente de lo previsto

Peter Sauber: la adaptación de Pedro de la Rosa está siendo más exigente de lo previsto
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Si hace escasas horas el propio De la Rosa transmitía tranquilidad y optimismo de cara al futuro inmediato de él mismo y de Sauber, ahora salen unas declaraciones del mandamás suizo Peter Sauber que hacen pensar lo contrario. El suizo no hablaba exclusivamente por De la Rosa, pero precisamente por eso también le toca de lleno como a su joven compañero Kamui Kobayashi.

La adaptación de Pedro de la Rosa está siendo más exigente de lo previsto.

Esta mañana yo mismo me hacía eco de la optimista visión de futuro de Pedro de la Rosa y deseaba la consecución de buenos resultados para además atraer patrocinadores estas palabras de Peter Sauber me/nos sientan como un jarro de agua fría. Los rumores ya hacen el resto, y hacen bueno el refrán que dice “cuando el dinero entra por la puerta, el amor salta por al ventana”. Y es que el peligro que suena para Pedro de la Rosa ahora mismo se llama Pastor Maldonado y sus maletín bajo el brazo.

Estoy convencido de que el hecho de que nuestros dos pilotos sean nuevos en el equipo juega un cierto papel en el asunto. No quiero tocar el tema de los pilotos porque sería inapropiado. Lo cierto es que tomamos esa decisión y los argumentos en que se basó siguen siendo válidos. Probablemente subestimamos es el tiempo que necesitarían los pilotos para familiarizarse con el equipo y el coche. Pedro, después de varios años como probador, vuelve ahora a pilotar y ese proceso de adaptación es probablemente más exigente de lo que habíamos previsto.

Parece que Peter Sauber no se arrepiente ni mucho menos de la elección de sus pilotos y reconoce su valía, pero me parecen estas palabras una disculpa nada piadosa y sí con tintes de traición. La falta de patrocinadores a Sauber le afecta como a cualquier otra escudería, y aquí está el problema pues Pastor Maldonado niega que vaya a ir en breve a la Fórmula 1:

Por el momento, no. Es seguro que intentamos llegar a la Fórmula 1, pero no es fácil. Ahora mismo es muy complicado para cualquier piloto. Necesitas un montón de dinero en los equipos pequeños.

Mal pinta el asunto para Pedro de la Rosa. Por mucho que Sauber se excuse es obvio que entre la juventud y proyección de Kobayashi y la veteranía de Pedro, prefiere bajar del monoplaza al español. Que el venezolano habitual de la GP2 niegue su llegada inmediata a la Fórmula 1 mencionando el vil metal (con el que él cuenta) no hace más que confirmar algo que se podría hacer público para el próximo GP de Mónaco que se celebra en mayo. Aunque también hay quien da por hecho el cambio de titular del asiento para el GP de España, lo que ya sería el colmo de la disculpa para Sauber.

A los más veteranos aficionados de la Fórmula 1 seguro que no nos suena ésto a nuevo: cuando unos rumores ni se niegan rotundamente ni los confirman sus implicados suele pasar que se terminan cumpliendo a rajatabla. Sospecho que Sauber se deshace en elogios a un módico precio. Pero de tres carreras, dos de ellas con retirada completa del equipo por averías mecánicas ajenas a los pilotos, la única que ha visto terminar a un Sauber muy cerca de los puntos ha sido con Pedro de la Rosa en el GP de Australia. Ésto son hechos. Y la valía demostrada por el joven Kamui Kobayashi en el poco tiempo que lleva el nipón en la Fórmula 1 también.

Tengo mis dudas de que el venezolano pueda rendir siquiera al nivel que es capaz el nipón una vez no la mecánica del coche y algún que otro accidente como el de Melbourne le respeten. Intentar comparar a Pastor Maldonado siquiera con Pedro de la Rosa me parece una broma de mal gusto. Pedro es veterano, está en plena forma (demostrado) y demuestra que puede estar ahí en lo que el coche le permita. “El otro” todavía tiene que demostrar al menos regularidad y bastante más coraje todavía en GP2. Espero que Peter Sauber tenga bien presente que el monoplaza lo pilota el piloto, y que ello puede hacer llegar los resultados, no los dólares. Eso es pan para hoy y hambre para mañana.

Vía | Sportlifepress

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