Nos quedamos con ganas de conocer en persona el nuevo Kia Cee’d 2012 en la presentación internacional que tuvo lugar en Málaga el pasado mes de abril. Es una pena, pero para la prensa y medios de España hubo poquísimas plazas. La verdad es que en cuanto lo vimos nos pareció un producto atractivo.
Ahora que hemos podido probarlo en la presentación nacional que tuvo lugar en Madrid, puedo deciros que me ha dejado buen sabor de boca y que me parece un modelo muy a tener en cuenta, sobre todo por tener una relación calidad/precio francamente interesante.
De hecho creo sinceramente que algunos aspectos de este coche (ojo, no todos) dejan en evidencia a otros modelos más caros del mismo segmento, el C, el de los compactos, el segundo tipo de coche más vendido en nuestro país, por detrás del segmento B, el de los utilitarios.
Kia Cee’d: bastidor totalmente nuevo
Esta que he probado es la segunda generación del Kia Cee’d. La primera se presentó allá por el año 2006, y se comercializó en el 2007. Aquí en España ha sido un modelo razonablemente conocido, que ha vendido una cifra de unidades bastante respetable. A nivel mundial, contando también el Pro Cee’d y el Sporty Wagon, se han vendido más de 630.000 unidades.
La verdad es que era un coche asequible, con buena calidad de acabado y que funcionaba bastante bien. El nuevo Kia Cee’d es un coche totalmente nuevo, con bastidor nuevo y carrocería nueva. La primera pregunta que cabría plantearse sería ¿es el nuevo mejor que antiguo?
Y la respuesta es: sí, lo es. No estaba nada mal el anterior y el nuevo está aún mejor. Como sucedía en el primer Cee’d, está diseñado, desarrollado y fabricado en Europa, para los gustos europeos. El diseño y el desarrollo técnico se han hecho en Alemania (en Fráncfort y en Russelsheim), mientras que se fabrica en Eslovaquia (en Zilina).
No quiero entrar demasiado a explicaros cómo es el diseño, pues en abril ya os contamos muchas cosas de él. A mí personalmemte me recuerda mucho a un coche alemán, lo cual no es extraño sabiendo donde lo han diseñado. En este sentido es bien clara la diferencia con el Hyundai i30, primo suyo, de líneas más orientales.
La línea del Kia Cee’d hasta me recuerda un poco al Opel Astra. Creo sinceramente que la parte más destacada y llamativa del coche es el frontal, y al menos a mí, cuanto más lo veo, más me gusta. Si a vosotros os gusta también, o bien todo lo contrario, la responsabilidad es del jefe de diseño de Kia, Peter Schreyer.
El Kia Cee’d es una berlina compacta de cinco puertas y cinco plazas, de 4,31 m de largo (solo cinco cm más que el anterior Cee’d), 1,78 m de ancho (un cm menos) y 1,47 m de alto (también un cm menos). La distancia entre ejes se mantiene en 2,65 m. Pesa en vacío entre 1.183 y 1.300 kg. Un poco más adelante también habrá una versión familiar (Sporty Wagon) y la versión de tres puertas Pro Cee’d (para 2013).
El parabrisas está muy tendido y le confiere al coche una silueta muy aerodinámica, completada por el alerón posterior sobre la luneta. Tiene un coeficiente aerodinámico de 0,30, lo cual no está nada mal para un coche de dos volúmenes. El plástico de los faros delanteros y de los traseros está perfilado y abombado ligeramente hacia afuera para colaborar con la aerodinámica.
Las luces de marcha diurna en led, y los pilotos posteriores también en led, no vienen de serie en la versión más baja del Kia Cee’d, vienen en la media (que es la que probé y de la que podéis ver las fotos de este articulo) y en la alta.
Interior de acabado sobresaliente
Lo que os parezca el diseño interior del nuevo KIa Cee’d es algo subjetivo y personal, así que compararlo con otros modelos de la competencia no nos conduciría a ninguna parte. Lo que sí se puede comparar es la calidad visual percibida de los materiales y acabados del interior del coche.
Y aquí es donde Kia da un golpe sobre la mesa y deja claro que se puede ofrecer una sobresaliente calidad de acabado por menos dinero que la competencia. Y este es el aspecto al que hacía referencia al principio, en el que puede dejar en evidencia a modelos de la competencia de precio similar, y hasta más caros.
Vamos a decir las cosas con claridad: el coche de referencia en el segmento C es el Volkswagen Golf, modelo de destacadas cualidades que sin embargo no es precisamente asequible (y ojo, que nadie me malinterprete, ya que no estoy entrando a valorar si compensa o no pagar más por él).
Pues bien, centrándome solo en la calidad visual aparente del interior, el nuevo Kia Cee’d, bastante más barato que un Golf, le pone en evidencia. Para el precio que tiene el Volkswagen debería de estar aún mejor. Es más, hace poco estuve a bordo de un Golf VI Advance y me fijé en algunos detalles que me dejaron un poco decepcionado.
Y cuidado, que estoy hablando de detalles, y de fijarse mucho en la calidad de los acabados, incluso de cerca y rebuscando. Por ejemplo un elemento que denota cuánto cuidado se ha tenido, son las lamas de las rejillas de las salidas de ventilación del habitáculo. En el Golf se notan, aunque sea muy poco y de cerca, las juntas y sutiles rebabas del moldeado del plástico.
En el Cee’d no se notan, así que bravo por ellos. Y también critico el plástico de la guantera del Golf, por cierto reciclada del Golf V, es plástico duro, sonoro y no muy aparente. En el fondo es algo poco importante, pero con el precio que tiene no debería ser así.
Más allá de la anécdota de las rejillas de ventilación, todo el interior roza un nivel muy bueno. El aspecto y tacto del material acolchado del salpicadero y de la parte alta del panelado de las puertas (tanto delanteras como traseras) es muy bueno. El plástico duro de las partes bajas está a un nivel similar al de un Golf y otros modelos generalistas, con juntas de moldeado discretas y brillo contenido.
De todos modos al menos a mí me encantaría que para estas partes, tanto Kia como otras marcas optaran por plástico revestido o incluso acolchado, que aún aportara más calidad visual.
También se recurre a partes de plástico liso y suave, a partes de plástico negro brillante (en el acabado más alto), a plástico pintado en gris y lacado, o a detalles cromados. El tacto de los botones al presionalos es muy satisfactorio y el ajuste de las piezas es muy bueno, siendo muy muy difícil encontrar bordes afilados desagradables.
Los mandos están bien colocados y ordenados, y son accesibles. Quizás a primera vista parezca que hay demasiados botones en el volante. Quizás también uno se acostumbre a ellos. Están los mandos para la radio, control de velocidad, computadora y teléfono.
El cuadro de instrumentos es muy claro y legible, de diseño sencillo y números grandes y muy bien iluminados en blanco (computadora y botones van en rojo). Lamento decirlo pero no me gustó que el indicador de temperatura del agua no exista como tal, con un pequeño reloj analógico, sino que se encuentra escondido dentro de la computadora de a bordo.
Y tampoco me gustó el indicador de consumo instantáneo, que en lugar de darlo en cifra lo da sobre una barra que va de 0 a 10 l/100 km con una división en medio. Me parece muy poco preciso.
Interior muy espacioso, de nuevo sobresaliente
Otro de esos detalles que suelen dar sensación de calidad es cómo cierran las puertas, y qué sonido hacen al cerrarse. al entrar dentro de un Kia Cee’d uno de nuevo tiene una buena sensación. Las puertas cierran suavemente, sin tener que hacer mucha fuerza y con un sonido agradable. Tienen doble junta de goma para el cierre, continua en todo el perímetro, tanto en la puerta como en el marco.
Tengo la sensación de que el nuevo Kia Cee’d está entre los más espaciosos del segmento. De hecho el Golf era también referencia en su segmento porque era muy espacioso, sobre todo en las plazas traseras, donde el espacio para las piernas es muy bueno.
Pues bien, en las plazas traseras del nuevo Cee’d yo me he encontrado con mucho espacio para las piernas y para los pies, diría que casi casi como en el Golf, y con una buena altura libre hasta el techo. Sin embargo hay que puntualizar algo: si el coche viene con techo solar de vidrio (opcional con sobreprecio), que cubre tanto las plazas delanteras como las traseras, la altura libre disminuye.
Y aunque un techo de vidrio me gusta, por esa interesante cualidad de que entre más luz, poder ver las estrellas una noche de verano, o “semi-descapotarse” en un día de primavera, no me sentí cómodo con la altura libre que quedaba hasta el techo, sobre todo delante, yendo de conductor.
La posición de conducción es correcta. El volante se regula en altura y profundidad, y además forrado en cuero suave tiene un tacto bastante agradable. El asiento del conductor también se regula en altura, sin embargo, con techo de vidrio, si uno lo sube mucho para tener más visibilidad se puede encontrar con que casi toca con la cabeza en los parasoles.
La anchura interior tanto delante como detrás me pareció muy razonable. Sin embargo el espacio en anchura para piernas del conductor me pareció un poco justo, sobre todo para la pierna derecha. Al menos en mi caso mi rodilla derecha estaba un poco incómoda algo apretada contra el lateral del hueco portaobjetos de la consola central.
Hablando de huecos para dejar cosas, hay suficientes por el interior: el de la consola central, el del reposabrazos, guantera, puertas, respaldos de los asientos delanteros. Los huecos de las puertas no están forrados ni con tapicería ni con goma. El reposabrazos central delantero apenas sirve para nada para el conductor (queda muy retrasado y al menos mi codo no llegaba a apoyar), debe de estar pensado más bien para el acompañante.
Los asientos son bastante cómodos, aunque no tienen regulación lumbar y creo que no les vendría mal tenerla. Pueden resultar de acolchado ligeramente blando para algunas personas. La sujeción lateral de los asientos delanteros es también correcta, aunque quede constancia de que no son deportivos.
La tapicería de la versión intermedia, téxtil, no me entusiasmó demasiado por su tacto un tanto sintético, a poliéster.
El maletero del nuevo Kia Cee’d tampoco está mal. Según Kia tiene 380 litros de volumen, pero yo diría que es contando también el espacio que hay debajo del suelo, y que está compartimentado con un organizador. Aún así conviene recordar que el Honda Civic 2012, que mide 4,30 m, tiene un maletero de 477 litros.
El suelo queda más bien alto y el borde de carga no se encuentra a demasiada altura, así que no es complicado meter y sacar cosas del maletero. La altura libre dentro del maletero no me parece muy generosa.
Los asientos traseros son abatibles en dos partes asimétricas, tanto el respaldo como la banqueta, pudiendo ampliarse entonces el maletero hasta los 1.318 litros.
Mañana: motores, versiones, equipamientos, precios y conducción del nuevo Kia Cee’d 2012 (de un diésel y de un gasolina).
Continuará…
