Probamos el Aston Martin DB12 Volante: un descapotable de ensueño con 680 CV que me compraría para disfrutar de una merecida jubilación

Probamos el Aston Martin DB12 Volante: un descapotable de ensueño con 680 CV que me compraría para disfrutar de una merecida jubilación
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Se acerca el verano y las calles empiezan a llenarse de coches descapotables, aunque del que hoy nos ocupa no veremos muchos. Se trata del espectacular y exclusivo Aston Martin DB12 Volante, un precioso superdeportivo descapotable de techo de lona con 680 CV que ya hemos podido probar para contarte qué se vive a bordo de esta maravilla.

Aston Martin como marca de coches está viviendo un momento importante en Europa. Se encuentra en plena renovación de todos sus modelos más importantes, como la familia DB12, el Vantage de nueva generación o el DBX que en breve recibirá una puesta al día.

También continúa con el desarrollo de modelos especiales dirigidos a los coleccionistas más acaudalados, como el Valkyrie o el Valour, auténticos iconos que pasarán a la historia del mundo del automóvil por méritos propios. De este último el 50% de las ventas globales han correspondido a Europa.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 16

Las ventas generales van bien a nivel europeo, con un crecimiento del 38% en 2023 respecto a 2022 y 1.584 unidades entregadas a clientes el pasado año. De ellas, 895 correspondieron a coches deportivos y 689 al SUV DBX.

El éxito se debe en parte a la gestión del nuevo CEO para Europa, Andreas Bareis, que ha destacado en el trato cercano a la red de concesionarios y por poner en marcha un programa de experiencias de cliente que hasta ahora no era eje esencial en las actividades de la marca.

También nos comentaban desde la marca que el efecto Fórmula 1 es muy importante, algo que se demuestra con el hecho de que más del 50% de los coches que venden van pintados en el color verde tan similar al de los bólidos de Fórmula 1 o el hecho de que el Aston Martin Vantage de anterior generaci´on haya tenido el 70% de sus ventas en el acabado F1 Edition.

DB12 Volante

Aston Martin Db12 Volante Prueba 8

Las siglas DB llevan mucho tiempo presentes en los deportivos de Gydon. Son las iniciales de David Brown, que unió Lagonda a Aston Martin en 1947 al adquirir ambas empresas.

El DB12 Volante hereda este nombre presente en los descapotables de la marca desde el año 1965. El nuevo modelo comenzó a desarrollarse en paralelo al DB12 Coupé, y no como una versión derivada de este último “a posteriori”. Esto es importante matizarlo para entender el avanzado nivel que tiene este coche, casi idéntico en cuanto a cifras a su hermano de carrocería cerrada.

El 55% de los clientes del DB12 Volante serán nuevos clientes en la marca Aston Martin

Estéticamente podemos considerarlo un coche fiel al ADN de la marca, y bajo mi punto de vista uno de los modelos más acertados de los últimos años. El frontal está marcado por su imponente parrilla, de gigantescas dimensiones y con esas formas que inequívocamente te indican que estás ante un Aston Martin cuando tienes la suerte de ver uno de estos por la calle.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 4

Las ópticas delanteras muy elaboradas presiden un morro muy largo y plano, situado muy bajo y con un capó esculpido con una serie de nervios que marcan sus formas con elegancia y contundencia.

En la vista lateral encontramos unas branquias gigantescas que abren hueco sobre los pasos de rueda delanteros, ayudando a que haya más espacio libre en esa zona y así conseguir una menor temperatura de este comportamiento, ayudando así a bajar la temperatura de los frenos y neumáticos delanteros.

Si seguimos el repaso visual del coche, las llantas de 21 pulgadas con mayor sección en las traseras también destacan de sobre manera.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 6

La trasera es esbelta y elegante, con unas ópticas muy perfiladas que se integran perfectamente en esta parte de la carrocería. La sección plana que deja la tapa del maletero alberga en su interior un alerón de apertura vertical que, cuando es necesario, se despliega para dotar a la trasera de mayor apoyo aerodinámico.

Por debajo, un difusor trasero de contenidas dimensiones integra dos salidas de escape, una a cada lado, que demuestran que no hace falta ornamento para conseguir un conjunto atractivo visto desde atrás.

Capota de lona

El Aston Martin DB12 Volante es un descapotable de cuatro plazas, y como no podía ser de otra forma, su capota es de lona. Es la solución más elegante para este tipo de coches, y también la que permite reducir al mínimo el espacio necesario para alojarla y ahorrar peso en la parte posterior, algo importante para el aspecto dinámico de un coche que pesa aún así 140 kilos más que el Coupé.

Más allá de por la capota y su accionamiento mecánico, el aumento de peso se debe a los refuerzos estructurales que recibe el chasis para equipararlo al DB12 Coupé

La capota es muy elaborada, tiene ocho capas diferentes de aislamiento para asegurar un confort térmico y acústico cercano al del DB12 Coupé, ya que como este este coche puede alcanzar 325 km/h de velocidad punta.

Su accionamiento es totalmente mecánico, se puede hacer en parado, en marcha o desde el mando a distancia, y necesita 14 segundos para abrirse completamente según las cifras oficiales que da Aston Martin, aunque en nuestro cronómetro lo paró en apenas 12,5 segundos.

Si haces la maniobra de apertura o cierre en marcha, deberás asegurarte que lo haces a menos de 50 km/h, aunque el sistema está preparado para aguantar vientos en contra de hasta otros 50 km/h.

Pese a esas siete capas de aislamiento, la capota del DB12 Volante ocupa solo 26 centímetros de alto cuando se ha doblado bajo el sistema K-Fold ideado para hacer la apertura y cierre en dos fases. Es entonces cuando se esconde por completo justo detrás de los asientos posteriores, dejando una trasera de líneas planas que recuerdan a la cubierta de un yate.

Interior con botones y alguna sombra

Aston Martin DB12 Volante Interior

Nos subimos al habitáculo del DB12 Volante y nos da la bienvenida una placa situada en el umbral de la puerta que nos recuerda que este coche se fabrica a mano en Gran Bretaña, pese a que tiene cierta herencia germana en otros aspectos de los que hablaremos más tarde.

Encontramos un interior muy elaborado, con unos asientos deportivos tapizados hasta el extremo en piel de la más alta calidad, siempre con el logotipo de Aston Martin bordado con mucho detalle sobre los reposacabezas integrados.

Destaca la consola central que sube el diagonal hacia la parte frontal, cargada de botones, casi uno por cada función. Estos son tal vez los elementos que menos me convencen al tacto, ya que están fabricados en ese material llamado Negro Piano que, pese a tener buenos ajustes, no son todo lo sólidos al tacto que esperas en un coche de este nivel y posicionamiento.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 10

En la parte superior de la consola hay cuatro mandos giratorios para subir o bajar la temperatura de cada lado del coche, así como ajustar el caudal de aire que sale por las molduras situadas horizontalmente en la parte superior.

La información de la temperatura elegida se muestra, junto con muchos otros datos, en la pantalla de 10,25 pulgadas rectangular que preside esa consola central.

Se hace extraño en un coche de este nivel que hayan desaparecido los relojes analógicos tras el volante, uno de esos elementos que tal vez podrían haber sobrevivido a la digitalización

El resto del habitáculo destaca por la combinación de buenas pieles y materiales que podemos elegir a nuestro antojo a base de telonario hasta tener el DB12 Volante hecho a nuestra medida como si fuese un traje de Saville Row.

El acceso a las plazas posteriores se realiza desplazando el respaldo de los asientos hacia adelante. Cuando lo haces, la banqueta también se mueve longitudinalmente para dejar paso a esas plazas que, si bien no son las más pequeñas que he visto en coches de su tipo, tampoco son recomendables para llevar a adultos de forma habitual.

En marcha con el DB12 Volante

Aston Martin DB12 Volante Prueba 12

Llegaba por fin el momento de ponernos al volante, por Alemania, del precioso DB12 Volante. Tuvimos la suerte que la preciosa zona de la Selva Negra, había amanecido soleada y con unas suaves temperaturas de 16 grados en aquella mañana de jueves de abril, así que la experiencia con la capota abierta prometía.

El coche elegido iba pintado en color Caribbean Blue Pearl con la capota a juego en azul marino y el interior con molduras en madera y tonos suaves. Llevábamos instalado el deflector de aire posterior que inhabilita las plazas traseras, un elemento muy recomendable que impide que se cuele más aire del debido en el interior.

Para arrancar el coche hay que pulsar el botón con el logo de Aston Martin situado en el centro entre ambos asientos delantero. Al hacerlo, el espectacular motor 4.0 V8 biturbo de origen Mercedes-AMG cobra vida y se hace notar con un estruendoroso sonido, afinado y embriagador a partes iguales.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 3

Selecciono D desde el mando diseñado para ello, también integrado en la zona central de control del vehículo y emprendemos la marcha.

Mientras me voy haciendo a los mandos del coche, a la posición de conducción y a lo poco intuitivos que son los botones táctiles del volante, percibo que la dirección tiene un tacto muy directo incluso en este modo Confort en el que circulábamos en esos primeros compases.

El volante es grande y de aro grueso, y desde él basta con hacer pequeños movimientos para que el coche se circunscriba en las curvas.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 15

Salimos de la población hacia las preciosas carreteras de montaña de la Selva Negra, siempre rodeadas de árboles a los lados. En cuanto se abre una primera recta ante mí, no dudo en pisar a fondo el acelerador y la respuesta del coche me deja sin palabras.

“Cómo puede correr tanto este coche, si solo voy en modo Confort” pienso para mí mientras trato de despegar la nuca del reposacabezas y ya de paso el cerebro del cráneo. El motor 4.0 V8 de 680 CV y sobre todo los 800 Nm de par disponibles entre 2.750 y 6.000 RPM hacen que este coche te pegue al asiento sin compasión si le pisas a fondo.

Si no lo haces y lo que quieres es pasear en él, te ofrece un tacto delicioso, con una suavidad contundente de esas que solo los buenos V8 pueden ofrecer, pero si le buscas las cosquillas es realmente impresionante la respuesta que te da.

Lógicamente con estas cifras de potencia, es normal que el coche corra, pero es que me recordó más al Ferrari 296 GTB de 830 CV que a un Porsche 911 Turbo S de 650 CV

En las curvas el conjunto entra con facilidad, y transmite sensaci´ón de aplomo que invita a ir más y más rápido. Paso al modo Sport y el carácter del coche se vuelve más directo mientras el sonido que emiten las dos salidas de escape en la trasera se hace más perceptible.

Es un sonido precioso en aceleración, que mezcla la contundencia a la hora de subirlo de vueltas con el silbido del motor turbo, también perceptible, y se completa con unas afinadas detonaciones cuando sueltas el acelerador y el coche avanza en retención.

Aston Martin Db12 Volante Prueba 13

En este sentido, me gusta el hecho de que el DB12 Volante cuente con botones para modular el sonido de escapes en tres niveles independientemente del modo de conducción que lleves seleccionado. Sin duda, cuando compras un descapotable de este tipo, la melodía mecánica debe ser acorde al resto del coche, y en este ya creo que lo está.

En el modo Sport las suspensiones adaptativas se endurecen un punto respecto al modo Confort, pero en ningún caso lo sentí como un coche incómodo. Siempre está presente ese posicionamiento SuperTurismo de la que habla Aston Martin, combinando un confort de marcha con una puesta a punto de chasis y suspensiones que tienen buen compromiso entre confort y deportividad.

Aston Martin DB12 Volante Prueba 18

La unidad que probé equipaba el equipo de frenos carbono cerámicos opcionales, que ahorran 27 kilos de masas no suspendidas en el conjunto de discos de 400 mm en el eje delantero y de 360 mm en el eje trasero.

Sorprende la capacidad que tiene de pasar tanta potencia y tanto par al asfalto solo a través del eje posterior. Sobre asfalto seco es un coche que va sobre railes y permite hacer muy fácil lo que podría parecer difícil

La posición de conducción muy baja, con las piernas bien estiradas y el trasero a ras de suelo, es perfecta para un coche de este tipo. Me encanta que apenas se cuela aire en el interior gracias al deflector trasero y a una aerodinámica muy trabajada, que hace que la experiencia con el techo abierto sea sublime.

Pero lógicamente también había que cerrar en algún momento el techo y comprobar así cómo la capota de ocho capas ofrece un nivel de aislamiento de primer nivel. Es más, sin haber probado el DB12 Coupé, me atrevo a decir que no puede ser mucho más silencioso y refinado que este, sencillamente porque es imposible.

Conclusiones del Aston Martin DB12 Volante

Aston Martin DB12 Volante Prueba 2

Con el nuevo modelo descapotable DB12 Volante, creo que la firma británica ha dado en el clavo, poniendo en el mercado un coche que combina como pocos la elegancia y deportividad con unas prestaciones y una puesta a punto dinámica de primer nivel.

El Aston Martin DB12 Volante es sin duda un salto adelante importante respecto a sus antecesores los DB11 Volante y otros modelos descapotables del pasado de la firma de Gydon. Su precio es alto pero no desorbitado, ya que en el mercado español con impuestos y en dependencia del nivel de equipamiento y personalización que elijamos, rondará los 300.000 euros, en línea con lo que cuestan hoy en día rivales como el Porsche 911 Turbo S Cabrio.

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