La electrificación de la esfera automotriz puso de nuevo sobre el mapa las denominadas tierras raras, 17 elementos químicos que se usan para fabricar desde motores de imanes permanentes para coches eléctricos hasta equipos militares y que China quiere usar para contraatacar a Estados Unidos en su guerra comercial.
Ahora el objetivo es garantizar la independencia de los recursos, y por eso Rumanía ha anunciado que está reabriendo varias minas de minerales de esta materia prima para atraer a inversores que fabriquen baterías para coches eléctricos en suelo europeo.
Rumanía quiere atraer a inversores
Según explica Automotive News Europe, el Gobierno rumano, presidido por Klaus Iohannis, está renovando las operaciones en tres minas que producen metales raros incluyendo europio y disprosio por primera vez en tres décadas.
Actualmente el país se encuentra en conversaciones con algunos fabricantes de baterías, no especificados, para llevar a cabo una inversión de más de 50 millones de euros. Y es que Rumanía quiere formar parte de la ofensiva europea materializada en la Alianza Europea de Baterías y asegurarse de que una de las plantas se quede en el país de la península balcánica.
Y espera unirse a la red europea de baterías a través de Radioactiv Mineral Magurele, una compañía que tiene sus raíces en la producción de uranio y durante la era comunista, en tierras raras. Mientras tanto Daimler ha anunciado planes para construir plantas en Polonia y la minera Rio Tinto ha estado explorando la extracción de litio en Serbia.
Para hacernos una idea del uso que se le da al disprosio, este elemento está presente en condensadores, sensores, motores híbridos, discos duros, turbinas eólicas y micrófonos, mientras que el europio es ampliamente utilizado en el ámbito nuclear, de defensa y pantallas LCD.
El neodimio, por su parte, es clave para la fabricación de los imanes permanentes usados en los motores eléctricos de alta eficiencia.
¿Cuál es la cara B de la minería de tierras raras? El impacto ambiental. Suelen estar en concentraciones bajas o mezclados con otros elementos, formando compuestos que hay que disociar para conseguir el elemento puro. Y eso requiere usar mucha agua, terrenos así como procesos químicos y físicos.
Además, algunos elementos desprenden altos niveles de radiación: esta fue la principal causa de que el Gobierno de Castilla-La Mancha, en España, enterrara el proyecto minero de Quantum Minería en Campo de Montiel, Ciudad Real. Aquí se había detectado la presencia de monacita gris, que es, junto a la bastnasita, la principal mena de tierras raras.
