La Policía Nacional acaba de hacerse con un “vehículo patrulla” muy particular que ni es un coche, ni se mueve por tierra. Lo han apodado “megadrón” en sus redes, aunque su nombre en realidad es EHang 216 y técnicamente se define como un Vehículo Aéreo Autónomo (AAV).
Esta aeronave de ocho hélices y una capacidad de carga máxima de 220 kilos es capaz de transportar a dos personas, pesa solo 600 kilos y puede alcanzar una velocidad de 130 km/h.
Allá donde el helicóptero no llega
Acaba de presentarse en el marco del Word ATM Congress, pero ya debutó el año pasado sobre el cielo de Seúl en forma de taxi volador y formó parte de un programa de pruebas llevado a cabo en Sevilla. También se están realizando pruebas con él en otros países como Estonia o Japón.
🏁Nuestro nuevo megadron🏁
— Policía Nacional (@policia) October 5, 2021
600 kgs de peso✅
Acceso a zonas contaminadas NRBQ✅
Acceso aéreo a espacios reducidos✅
El uso de este vehículo aéreo autónomo va a situar a la @Policia Nacional🇪🇸 a la vanguardia policial europea en materia de drones#SiempreMejores #SomosTuPolicía pic.twitter.com/Z37W0fuPEI
En la presentación del nuevo vehículo volador policial EHang 216, la Policía Nacional ha declarado que, entre otros, se usará para poder acceder a espacios aéreos reducidos y maniobrar remotamente en aquellas situaciones donde el helicóptero no es tan eficiente, y en zonas contaminadas NRBQ. Es decir, en el caso que se produzca un incidente nuclear, radiológico o biológico, para reducir o minimizar las consecuencias del mismo.
Este dron autónomo fabricado por EHang (especialistas en este tipo de vehículos), es capaz de despegar y aterrizar verticalmente, tiene una longitud de 5,6 metros y una autonomía máxima de 35 kilómetros. Además, utiliza conectividad LTE y 5G para comunicarse con el móvil o el centro de comando.
La unidad que ha presentado el cuerpo de Policía, cedida por su fabricante, forma parte de una serie de pruebas que se empezarán a llevar a cabo en España próximamente (en Barcelona y Santiago de Compostela) y que gestionará la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
Previsiblemente hasta 2023 como mínimo, la Unión Europea no tendrá listo el marco regulatorio para este tipo de vehículos voladores, ya sea en forma de asistencia para los cuerpos de seguridad del estado o en forma de taxi volador.
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