George Russell está siendo la gran revelación de la temporada en la Fórmula 1. Aunque muchos ya esperaban un gran rendimiento del joven británico, lo que era más difícil de predecir es que iba a estar por delante de Lewis Hamilton en cuatro de las cinco primeras carreras. En Miami volvió a llevarse el gato al agua.
Russell es el único piloto de la parrilla que ha conseguido estar en el top cinco en todas las carreras de esta temporada. Y eso le permite aguantar bastante vivo en la lucha por el mundial de pilotos, en espera de que Mercedes sea capaz de poner en pista una mejora que le permita luchar por las victorias.
Un inoportuno coche de seguridad volvió a dejar a Hamilton detrás de Russell
En Miami el joven británico hizo su peor clasificación de la temporada, cayendo en la Q2 y saliendo desde la duodécima posición. Russell explicó que no había tenido buen feeling con el coche, pero lo solventó con creces en carrera. Gracias a un macro 'overcut' con el neumático duro, Russell adelantó estratégicamente a casi toda la zona media.
Por cierto, el de Miami ya fue el tercer Gran Premio de cinco en el que no están los dos Mercedes en la Q3. Algo impensable en épocas pasadas y que habla de que el coche alemán tiene carencias a una vuelta, aunque en carrera parece claramente el tercer coche con mejor ritmo tras Red Bull y Ferrari.
El caso es que el 'overcut' de Russell parecía que solo le iba a llevar hasta la séptima posición, pero entonces un golpe de fortuna mejoró su carrera: salió el coche de seguridad por el accidente entre Pierre Gasly y Lando Norris. Russell no solo pudo hacer una parada con menor pérdida de tiempo, sino que se pegó a Hamilton.
Con neumáticos más nuevos y más blandos, Russell pasó a Hamilton, aunque no sin batalla, y un error de pilotaje de Valtteri Bottas, que iba por delante, le abrió la puerta para estar de nuevo en el top cinco. Una quinta posición que sirve para abrir hueco con un Hamilton que cada vez está más frustrado.
En realidad Hamilton ha ido más rápido que Russell en tres de las cinco carreras, pero le está pasando algo similar a lo que le sucede a Fernando Alonso con Esteban Ocon: la suerte le da la espalda. Como le pasase en Australia, en Miami otro inoportuno coche de seguridad hizo que Russell ganase la batalla interna en Mercedes.
Así, Hamiton va sexto en el mundial con 23 puntos menos que George Russell. Y el heptacampeón del mundo se lamentaba por la radio tras el Safety Car: "La estrategia no está siendo amable conmigo, tío", dijo. Después de la carrera, uno de sus habituales e interminables silencios como colofón a otro frustrante día en la oficina.
Hamilton tendrá que quitarse sus piercings antes del Gran Premio de Mónaco
Sin duda la polémica más extraña en la que se ha visto envuelto Lewis Hamilton este fin de semana ha sido la que atañe a sus piercings. La FIA ya le advirtió en Imola de que no podía correr con ellos por motivos de seguridad, pero se los ha traído también a Miami. Es una norma antigua, pero que la nueva dirección de la FIA quiere aplicar en serio ahora.
Hamilton de momento se niega a quitárselos alegando que hay algunos que no se puede quitar él mismo. Pese a que lo sabía desde Imola, la FIA le ha concedido de margen hasta Mónaco, lo que significa que en Barcelona también podrá correr con sus piercings sin riesgo a ser descalificado por ello. Sorprendente.
