Daniel Murias
El Peugeot E-308 de tercera generación se renueva tras cuatro años en el mercado. Este rival de los Citroën ëC4, el Opel Astra-e, Renault Megane E-Tech, Cupra Born o MG4 se mueve en un segmento donde faltan alternativas eléctricas, aunque es el único en proponer también una carrocería familiar. Y para seguir dando guerra, se vuelve más agresivo.
Así, el Peugeot 308 estrena un nuevo diseño frontal y algunas mejoras para seguir estando a la altura de sus rivales. Si bien los cambios se aplican a toda la gama del 308, incluida las versiones gasolina e híbridas enchufables PHEV, la variante eléctrica E-308 es la única en recibir cambios de orden mecánico.
Peugeot E-308: cambios estéticos y mecánicos
Las dimensiones del Peugeot 308 no cambian con este rediseño. El coche sigue midiendo 4,37 m de largo en la versión de cinco puertas (4,64 m con la carrocería familiar), con 1,85 m de ancho y 1,44 m de alto. En cuanto al diseño, la firma gala apuesta por una actualización relativamente discreta de su compacto con una silueta idéntica a la del modelo actual, aunque con un frontal rediseñado que exhibe líneas más agresivas.
Más pequeña que en la versión actual, la calandra es ahora del mismo color que la carrocería, mientras que los faros se hacen más pequeños y finos y se integran con la calandra gracias a la iluminación de ésta. Las falsas tomas de aire laterales, junto con los finos faros, le confieren una mirada agresiva, un semblante casi amenazador.
No hay grandes cambios en el interior, ya que Peugeot ha conservado el volante compacto, los asientos, el salpicadero y el i-Cockpit del modelo actual. Este último cuenta de serie con un cuadro de instrumentos digital de 10 pulgadas (con gráficos en 3D mejorados en el acabado superior) detrás del volante y una pantalla táctil central del mismo tamaño, compatible con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica.
Estas dos pantallas se complementan con los i-Toggles. Estos botones digitales personalizables, situados en la consola central y que permiten configurar hasta cinco accesos directos a las funciones elegidas por el usuario (multimedia, climatización, navegación, teléfono, etc.).
La única evolución mecánica la encontramos en el E-308 eléctrico. Si bien este último mantiene el motor de 156 CV, gana 34 km de autonomía media para ofrecer una autonomía máxima de 450 km. Esto se debe a una nueva batería que pasa de 51 kWh a 55,4 kWh de capacidad útil. Es una mejora, sin duda, pero sigue siendo una capacidad escasa, a pesar de ser relativamente eficiente, para un coche compacto que por definición debe ser el coche para todo y para todos.
Peugeot lo compensa con ahora la posibilidad de recargar del 20 al 80 % en 32 minutos en una estación de recarga rápida de corriente continua. Además, el E-308 incorpora por fin la función V2L (Vehicle to Load), que permite alimentar pequeños aparatos eléctricos de hasta 3,5 kW y 16 A con la batería de alto voltaje del vehículo.
Los precios del Peugeot E-308 rediseñado se darán a conocer cuando se abran las reservas, después del verano de 2025 y antes de su llegada a los concesionarios prevista en principios para el último trimestre del año o inicios de 2026.
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