Debes sentirte muy popular, y debe ser muy emocionante correr a toda pastilla por las calles de un polígono abandonado, pasándose por el forro las leyes y el sentido común, y matar a un chaval de 19 años, que eso sí, borracho, intenta torear tu coche como en aquélla película hacían con el tren.
Una vida más que se corta de cuajo por varios motivos: el alcohol, la velocidad, la falta de sentido común y la noche. Me parece una verdadera pena que estas cosas pasen en un país que se supone que es civilizado, y me parece horrible que haya gente que fomente este tipo de carreras, y que animen a otros a participar. Me parece lo más alejado a la razón, y el resultado esta vez ha sido un muerto, dos heridos graves y dos coches siniestro total. Un aplauso…
Las carreras ilegales están muy bien en las películas, donde todo es mentira, y seguro que estarían muy bien en espacios controlados. En la realidad no están bien, son temerarias y ponen en peligro a los demás, no sólo al que conduce. Son lo mismo que aquéllas estúpidas competiciones americanas de a ver quién frena antes de caer al precipicio… Esperemos que esto no vuelva a ocurrir.
Actualización: la carrera fue en Móstoles, Madrid, en el polígono industrial La Fuensanta. Gracias por comentarlo, se me había pasado por alto indicarlo.
Vía | El Pais, El Mundo
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