Hoy varios medios de comunicación están autorizados a hablar del nuevo Lamborghini al haber expirado el embargo que pidió la marca. En teoría se va a llamar Aventador, pero sigue sin ser oficial. Es el reemplazo del Murciélago, que ya no se vende. Se presentará en Ginebra el año que viene.
Respecto a su predecesor, se consigue una reducción de emisiones del 20% sin perder potencia, es más, la gana. De hecho, Lamborghini está exento de cumplir las normativas europeas de emisiones, por volumen de dióxido de carbono/km, al producir menos de 10.000 coches al año. Aún así, quieren vender eficiencia.
El fabricante quiere reducir sus emisiones en un 35% hasta 2015. Solo haciendo cambios en el motor y transmisión se ha logrado una reducción en emisiones de las dos terceras partes de lo que ha bajado en total respecto al Murciélago. El consumo estará en torno a 17,7 l/100 km en vez de 22 l/100 km.
Otras medidas para reducir las emisiones ha sido la adopción de ruedas de menor resistencia a la rodadura, el ahorro de 100 kg de peso gracias al carbono y mejoras aerodinámicas. El Ferrari 599 GTB Fiorano es ahora menos potente y más contaminante, pese a que el nuevo ¿Aventador? tiene tracción total y el 599 no.
La transmisión, de un solo embrague (aunque el efecto es parecido a un DSG), es manual robotizada, no se venderá manual en este modelo. Tiene siete velocidades y es más rápida y más compacta que la del Murciélago. El tiempo de salto entre una marcha y otra se cifra en 50 milisegundos, es mucha rapidez.
Hay tres modos de cambio: Strada (para conducción normal), Sport (más deportiva) y Corsa (solo para quemados y circuito y con “Launch Control” para salir pitando). Digamos que es como una transmisión automática secuencial de carreras pero para un coche que rodará por vías públicas.
El motor mantiene la cilindrada de 6.5 litros, pero se ha cambiado el diámetro y la carrera de los cilindos. Son 700 CV de potencia a 8.250 RPM y 690 Nm de par máximo a 5.500 RPM. La admisión es atmosférica y la inyección multipunto indirecta. No se ha adoptado la directa todavía por complicaciones técnicas.
La compresión sube de 11:1 a 11,8:1. Es un motor más ligero, se ahorran 18 kg respecto al anterior y se ha rebajado la altura del cárter seco para mejorar el centro de gravedad del coche y por tanto el comportamiento. El motor L539 tiene doce cilindros en V con una inclinación de 60º entre bancadas.
Las ventas empezarán en el segundo semestre de 2011, después de la presentación internacional. De momento no hay imágenes oficiales del coche. Pasará un año y poco más entre que se ha dejado de producir el Murciélago (abril) y que su reemplazo se venda. Lamborghini espera perder ventas a consecuencia de ese lapso.
Vía | Automotive News, Autocar
En Motorpasión | El próximo Lamborghini se llamará Aventador
