Las restricciones a la movilidad que han seguido a la pandemia han supuesto un duro golpe para la esfera del carsharing. En un escenario en el que el uso del coche compartido se ha quedado casi congelado, SEAT se está replanteando el futuro de su negocio de carsharing Respiro, según nos ha comunicado la propia marca.
En estos momentos, la estrategia de los servicios de movilidad de SEAT está centrada en asegurar la liquidez. Respiro tiene a 28 trabajadores en plantilla.
Coger un coche compartido en tiempos de pandemia
En un momento de fuertes caídas en el número de usuarios y en el que el coche compartido se puede convertir en un vector de contagio si no aplican las medidas de higiene necesarias, SEAT se está replanteando el futuro de Respiro, aunque por el momento no ha oficializado su salida de este mercado.
Pablo Gonzáles tiene 30 años, vive en Madrid y no tiene coche propio. Descubre cómo utiliza la aplicación de #carsharing de @respiro para facilitar los desplazamientos de su día a día. https://t.co/qkBRK5TtNl #SEAT pic.twitter.com/WY0YtmuJ5T
— SEAT España (@tuSEAT) July 24, 2019
Fue en febrero de 2018 cuando SEAT adquirió esta empresa española de alquiler de coches por horas, por un precio de cinco millones de euros. Fue la primera irrupción de la marca del Grupo Volkswagen en el mercado del coche compartido.
Una plataforma de movilidad compartida que comenzó su andadura en 2010, cuando introdujo un servicio de alquiler de coches y furgonetas por horas en Madrid. Actualmente cuenta con 15.000 usuarios en Madrid, que han visto interrumpido el servicio debido a la pandemia.
"En la situación actual que estamos atravesando, hemos sufrido una caída drástica del uso de los servicios de carsharing, y además, la previsión a corto y medio plazo no apunta a que vaya a ser mejor", explican a Motorpasión fuentes de SEAT.
Además, añaden: "Existe cierta desconfianza sobre el uso del transporte compartido actualmente". No obstante la firma de Martorell asegura que siguen trabajando en ofrecer productos y servicios de movilidad urbana -como la SEAT e-Scooter o el Minimó- y que "pronto" presentarán avances en este sentido.
WiBLE, el servicio de carsharing de Kia y Repsol, reanudó el pasado 17 de mayo su actividad en Madrid tras el parón forzado por el coronavirus, y Zity, el servicio de coches eléctricos y compartidos de Renault y Ferrovial, hizo lo propio el día 20 de mayo.
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