La FIA ha aprobó ayer algunas de las modificaciones propuestas durante el Consejo Mundial de Automovilismo celebrado el pasado miércoles. La primera decisión repercutirá directamente en sus arcas. Hasta ahora, las sanciones impuestas por los comisarios podían llegar a los 100.000 dólares. Como ya ocurrió durante el pasado Gran Premio de Alemania con Ferrari. Con la revisión de la FIA, la sanción máxima impuesta por lo comisarios podrá llegar a los de 250.000 dólares. En resumen, que se multiplica igual que ha pasado con los puntos otorgados al ganador de cada carrera.
También se confirma que los pilotos tendrán que responder ante la FIA por sus actos fuera de los circuitos. Aquellas multas o sanciones por conducción tendrán consecuencias y sanciones en su Super Licencia. Además la FIA quiere atar en corto las apuestas y va a tomar medidas y regulaciones para preservar y mantener la integridad del deporte.
Vía | FIA
