El líquido refrigerante es fundamental para que funcione bien el motor del coche: está diseñado para absorber altas temperaturas y también evita la corrosión o la oxidación de piezas. Esto cobra especial relevancia en olas de calor o de frío, por eso también se le conoce como anticongelante.
Con las temperaturas extremas que estamos teniendo en estos veranos interminables, revisar su nivel es más que recomendable. ¿Cómo sé si necesito rellenarlo y cómo debo hacerlo? ¿Pasa algo si mezclo anticongelantes diferentes? ¿Lo puedo rellenar con agua? Vamos a verlo.
Cómo comprobar el nivel del refrigerante y qué hacer para rellenarlo
El circuito de refrigeración del coche es completamente cerrado y estanco así que, a menos de que tenga alguna fuga (lo que es raro), lo normal es que se mantenga en un nivel adecuado. Pero con climatología extrema, o por el mero paso del tiempo, puede bajar del nivel apropiado. Si es así, tendremos que rellenarlo.
Comprobar que el líquido refrigerante está en el nivel correcto es muy fácil:
- Abrir el capó y encontrar el depósito. Este fluido se aloja en el denominado vaso de expansión (o de llenado), que suele ser un depósito de plástico transparente y normalmente con un tapón negro o azul. En el manual del coche encontrarás su ubicación si tienes dudas. Es importante no confundirlo con el del líquido del limpiaparabrisas.
- En llano y en frío. Para verificar el nivel es necesario que el coche esté en una zona plana y que el motor esté totalmente frío, o la medición no será exacta. Sobre todo lo segundo, ya que el líquido se expande cuando la mecánica está caliente y sube de nivel.
- Entre el máximo y el mínimo. El depósito del refrigerante tiene dos marcas: una de mínimo y otra de máximo. Si está entre estas dos marcas, el nivel es el adecuado y no necesita tarea alguna. Si no es así, hay que añadir más.
Si se da el caso que tenemos que rellenarlo, hay que hacerlo igualmente en llano y con el coche en frío. Al abrir el tapón del depósito hay que hacerlo progresivamente: puedes ayudarte de un paño para que haga la descompresión de forma progresiva.
Una vez abierto, basta con echar el líquido refrigerante hasta que se sitúe entre las marcas de mínimo y máximo. Lo recomendable es usar un embudo para que no se derrame.
A vueltas con el líquido refrigerante y el agua
Como vemos la tarea es sencilla, pero hay otro aspecto esencial en este mantenimiento del coche: el propio líquido refrigerante.
- El recomendado por la marca. Se aconseja siempre usar el que recomienda el fabricante y que también puedes encontrar en el manual del coche.
- No mezclarlos. Igualmente, no es aconsejable mezclar diferentes líquidos con distintos compuestos y diferentes propiedades. Como recuerda el RACE hacerlo puede crear una suerte de pasta sólida que, con el paso del tiempo y el rodaje, puede obstruir el circuito. Y eso se traduce en una avería. Si bien suelen ser de diferentes colores, esto no es indicativo: puede ser del mismo color pero tener compuestos diferentes.
¿Sirve el agua para rellenarlo? Pues como todo, depende. Para empezar algunos refrigerantes vienen concentrados, por lo que hay que mezclarlos con agua al 50%. Y otros directamente ya se venden diluidos en agua, por eso indican que no es necesario agregarla.
Esto significa que, en caso de emergencia y para salir del paso, podríamos rellenar el depósito con agua, pero siempre que ya haya líquido refrigerante en el depósito. Y además este agua tiene que ser destilada o embotellada, nunca del grifo.
Y bajo ningún caso se debe rellenar el depósito únicamente con agua porque el sistema de refrigeración no hará bien su función: el agua hierve a los 100ºC y se congela a los 0ºC. Por eso este tipo de líquidos contiene etilenglicoles y otros aditivos para mejorar tanto el punto de ebullición como de congelación.
¿Hay que sustituir el líquido refrigerante? De nuevo depende. Hay coches con circuitos de refrigeración que no necesitan cambiarlo, simplemente rellenarlo cuando hace falta. Esto es lo más habitual en los coches modernos. Aunque algunos más antiguos sí que aconsejan sustituirlo cada cierto tiempo. Sea como sea, esto se especifica en el manual del coche.
¿Cómo sé si tiene alguna fuga? Si bajo el coche ves una mancha normalmente amarilla o verde es que el circuito tiene pérdidas: puede ser un manguito, una junta u otro elemento en mal estado. También si ves que baja muy rápidamente.
En este caso, lo que toca es ir al taller para que repare la fuga y así evitar males mayores: un coche mal refrigerado puede provocar una avería grave, y costosa, en el motor.
