La cita final del Campeonato de Europa de Fórmula 3 y de las Fórmula 3 Euroseries fue mucho más angustiosa de lo que se podía prever, pero al final el resultado fue el deseado por la afición española, pues Daniel Juncadella logró asegurar los dos títulos a los que optaba: el Europeo de F3 y las F3 Euroseries. El fin de semana arrancaba bien para el catalán, pues Felix Rosenqvist lograba las poles para la primeras y tercera carreras, siendo Juncadella el autor del segundo mejor tiempo absoluto y saliendo así por delante de sus máximos rivales, Pascal Wehrlein y Raffaele Marciello en ambas carreras. Carlos Sainz saldria por su parte quinto en esas dos carreras.
Sin embargo todo se torció cuando apenas quedaban cuatro vueltas para el final de la primera carrera. Cuando todo parecía que Juncadella amarraría ambos títulos a la primera, el motor Mercedes de su Dallara F312 falló, ralentizándole y obligándole a abandonar. Felix Rosenqvist lograba el triunfo por delante de Pascal Wehrlein (a quien no cedió la victoria a pesar de correr ambos para Mücke), mientras que Carlos Sainz Jr. abandonó tras ser víctima de un toque en las primeras vueltas.
En la segunda carrera las cosas no mejoraban pues aún saliendo desde el pitlane, el coche de Dani Juncadella seguía fallando y le volvía a forzar a la retirada. La victoria iba a parar a manos de Sven Muller, y con Marciello segundo y Wehrlein octavo (pero sumando más puntos al no bloquearlos los pilotos procedentes del Británico) la ventaja de Juncadella se reducia. Sainz, saliendo último tras el accidente de la primera carrera, no podía ser más que decimotercero.
Finalmente en la tercera carrera del domingo Daniel Juncadella optó por la máxima prudencia y tras conservar su segunda posición en la salida, dejó pasar tanto a Wehrlein como Alex Lynn, que no bloqueaba puntos, teniendo por detrás a Félix Serrallés, en idéntica situación, y su compañero de equipo Sven Müller cubriéndole las espaldas. Carlos Sainz llegó a rodar quinto pero un nuevo incidente terminó de arruinar su fin de semana. Con Raffaele Marciello retrasado en la primera vuelta por un incidente, y Mücke optando por no dar órdenes de equipo en todo el fin de semana, el camino de Daniel Juncadella hacia el éxito se allanaba y con un cuarto puesto aseguraba ambos títulos.
