Dejà vu eléctrico. En Estero, Florida, un Smart ED ha sido acusado de provocar un incendio. El biplaza se encontraba en el parking de una casa unifamiliar, en pleno proceso de carga, y de repente se originó un incendio. Los bomberos han apuntado al cargador como posible causante del fuego. Una situación muy, muy parecida al primer episodio del caso Firesker, el de Texas.
Aunque los equipos de extinción de incendios pudieron controlar las llamas antes de que consumieran la vivienda, estas causaron unos daños de aproximadamente 200.000 dólares (unos 155.200 euros) en una casa valorada en 500.000 (aproximadamente 388.000 euros). Del coche no quedó ni el aire de la guantera. Los destrozos fueron tan graves que el eléctrico quedó irreconocible.
Poco se sabe en realidad de lo sucedido. Mientras la inquilina de la casa explica que su marido instaló el cargador justo el día antes, la aseguradora de la casa está investigando el suceso y una portavoz del Cuerpo de Bomberos ha recordado la necesidad de leer las instrucciones del fabricante y de emplazar los cargadores lejos de residuos o trapos sucios de grasa por una cuestión de seguridad.
Vía | News Press, NBC-2
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