La Fórmula 1 empieza a coger los malos hábitos del fútbol, donde la serie de dos partidos perdiendo después de dos partidos ganados se denomina crisis. Es el caso del mal arranque de temporada de Felipe Massa, no sabemos si Ferrari esperaba algo más de él pero sin duda los aficionados sí.
Si unimos esa potencial “plaza libre” (aún no hay muerto y ya lo estamos enterrando, pobrecillo) al adiós de Jean Todt (viejo “enemigo” del asturiano), más de uno ya está pensando en descorchar la botella de sidra sobre una copa de color rojo scuderia.
Otra pregunta que nos podemos hacer es si Alonso quiere irse de Renault. Dicen los entendidos, los no entendidos y que el coche de este año no está a la altura de sus pretensiones, y los resultados y lo que vemos nos hacen pensar lo mismo. ¿Pero es motivo suficiente? No siempre que ves una chica más guapa dejas a la tuya. Y además hay un contrato de por medio.
Además Alonso no es el único aspirante al incómodo pero deseado asiento de un Ferrari de Fórmula 1: Sebastian Vettel también suena como piloto de la marca italiana.
De momento, sólo rumores. Demasiado difusos como para sacar conclusiones, pero demasiado jugosos como para no hablar de ellos.
Vía | La Voz de Galicia
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