Goodyear ha decidido presentar batalla a la creciente presencia de las marcas chinas en el mercado de los neumáticos, y con argumentos de calidad en la mano han lanzado los nuevos Goodyear EfficientGrip Performance para compactos y berlinas, que tienen su reflejo en los Goodyear EfficientGrip Compact para los tamaños de llanta más reducidos. Los EfficentGrip actualmente cubren 39 tamaños, aunque poco a poco la marca extenderá el modelo hasta las 68 referencias.
No son neumáticos de ultra altas prestaciones, sino de altas prestaciones para el día a día, y no reemplazan ninguna otra cubierta del fabricante americano, aunque las tecnologías empleadas para su fabricación sí que sustituyen otras que quedan ya antiguas, como las del Excellence, el Eagle NCT5 y el Duragrip. Su objetivo es cumplir más allá de las expectativas que marca el etiquetado de los neumáticos, y para ver si lo consigue viajamos hasta el Circuito de Mireval, en Francia.
Empezamos por el principio, y es que las etiquetas consensuadas por los fabricantes en Europa, y que llevan ya desde noviembre indicando a los consumidores las características básicas de las cubiertas que compramos, se quedan muy, pero que muy cortas.
¿Por qué? Muy sencillo. Las etiquetas sólo hablan de consumo de carburante, capacidad de frenado sobre firme mojado y nivel de ruido ambiental. Tres parámetros.
Fabricar para salir guapos en la foto puede ser sencillo, relativamente, de forma parecida (aunque salvando las distancias) a lo que sucede en EuroNCAP. Dime cómo me examinas y te diré cómo me preparo, así que quien quiera marcar diferencia en el sector va a tener que espabilarse.
Para conseguir un producto que dé más de sí que lo que marca la etiqueta, en Goodyear consideran 50 parámetros a la hora de realizar sus controles. Y tras el trabajo realizado, ¿se notará mucho la diferencia? Sólo hay una manera de saberlo, pero los chicos de Goodyear, que son unos cachondos, nos han buscado dos: una en carretera y otra, en circuito.
Primera parte: Auris HSD, en carretera
Comenzamos haciendo carretera a bordo de un Toyota Auris híbrido. ¿Por qué, este coche? Bueno, el EfficientGrip Performance tiene una clasificación B en resistencia a la rodadura, y además marca 68 decibelios en cuanto a nivel de ruido. Ambas prestaciones las podremos evaluar si vamos con un coche que consuma poco y además lo hacemos por carretera abiert...
Un momento, ¿no he dicho yo que son unos cachondos? Pues eso, que nos hacen pasar por caminos de grava, ¡de grava!, para que comprobemos que, efectivamente, el ruido derivado de los neumáticos es bajísimo. Minipunto para los señores de Goodyear. No llevo un decibelímetro en la oreja pero tengo buen oído. Y efectivamente el neumático absorbe muy, muy bien.
En las reviradas carreteras que nos marca la ruta, tenemos oportunidad de forzar un poco (bastante) la marcha, y nos sorprende el buen agarre que tiene el neumático y lo mucho que cuesta hacerlo chillar. Además, se muestra muy fiel al trazado sin necesidad de introducir correcciones en la dirección.
Puestos a pedir cosas a este neumático, le vamos a pedir que frene. Pero que frene en esos caminitos de grava suelta que nos están haciendo pasar. Lo hacemos y, oye, como si fuera asfalto. Realmente nos sorprende el resultado. En suma, tenemos unos neumáticos que se notan firmes y seguros. Y encima apenas suenan, que era uno de los puntos que estábamos mirando.
Falta por saber cómo habrá ido la cosa en cuanto a consumo de carburante. Al llegar a nuestro punto de destino nos aguarda una sorpresa. Mi colega Mario Herraiz y yo hemos sido distinguidos con el galardón de conductores menos gastones. 3,8 l/100 km medidos en la gasolinera, nos dicen. O sea, que el neumático puede servir para sacarse unos buenos consumos.
Pero, ¿cómo se comportará si lo sometemos a condiciones más duras? Pronto lo sabremos, porque en la pista de pruebas que Goodyear tiene en Mireval hablaremos de resistencia a la rodadura, frenada en mojado, aquaplanning en curva y manejo del vehículo tanto sobre seco como sobre mojado. Y por si con las explicaciones no hay suficiente, de regalo hay un vídeo explicativo.
Segunda parte: Golf y Clase A, en circuito
Para empezar, una explicación sobre los bajos consumos. Resulta que el EfficientGrip Performance tiene un grado B en resistencia a la rodadura, cosa que ya sabíamos. Pero lo que no sabíamos era que esa resistencia es un 23 % inferior a la media de los otros cuatro fabricantes líderes del mercado.
Para demostrar no ya esto, sino la diferencia que hay entre calzar unos neumáticos B y unos neumáticos E, van a dejar caer dos Volkswagen Golf por una pendiente de 270 metros que tiene una inclinación del 3 %. ¿La diferencia? En una prueba salen 8,79 segundos, y en la otra, 9,23 segundos entre el uno y el otro. Lo que más sorprende es la prontitud con la que el Golf calzado con Goodyear comienza a moverse sin esfuerzo. Eso es lo que hace que luego aceleremos menos y corramos igual.
Vamos ahora con la frenada sobre mojado, donde el Goodyear EfficientGrip Performance obtiene una calificación A, la máxima. La prueba es una comparativa entre neumáticos mediante una frenada automatizada en línea recta cuando el vehículo entra en pista a 85 km/h. Los coches empleados son también Volkswagen Golf.
Aquí, lo interesante es observar no sólo la diferencia entre distancias recorridas con uno y otro neumático hasta la completa detención del vehículo, sino la velocidad residual a la que sigue circulando el coche que monta neumáticos E cuando el coche calzado con neumáticos A ya se ha detenido. Eso, e imaginarlo en un contexto menos amable, claro.
Moraleja a partir de este ejemplo: cuando el Goodyear EfficentGrip Performance ya te ha detenido sobre mojado, con un neumático calificado como E sigues avanzando a más de 26 km/h, lo cual puede equivaler a darse un buen castañazo que podrías haberte ahorrado. En comparación con la media de los otros cuatro fabricantes líderes del mercado, las pruebas avaladas por el TÜV dan una distancia de frenado 2 metros inferior.
Pero sigamos, porque ahora viene lo interesante. Vamos a poner a prueba de verdad los neumáticos dándole vueltas a un circuito de 80 metros de radio a una velocidad de 80 km/h. Pues vaya, diréis, ¿y eso qué tiene de dificultad? Pues ninguna, pero alguien nos ha montado un charquito con 8 mm de agua, lo que nos va a provocar un aquaplanning en curva bastante majo.
Lo que se mira aquí es cuántos grados se desvía el coche de su trayectoria inicial. Lo hacemos por comparativa con unos neumáticos que también obtienen una clasificación A en frenada sobre mojado (aquí yo no me metería con unos E, la verdad). De hecho, son unos Michelin Energy Saver+, y los resultados son, lógicamente, menos evidentes que en la frenada de emergencia que hemos visto antes. Mal iríamos...
¿Cómo, de menos evidentes? Pues... veamos. El promedio de desviación en los Goodyear es de 4,10 grados para las pasadas que ha dado nuestro grupo, un valor que asciende a 4,53 con los Michelin. ¿Es científica la medición? No, porque hay elementos que quedan condicionados por el factor humano, en especial el manejo de la dirección, así que estos datos hay que tomarlos con mucha cautela.
Donde sí que vamos a observar una diferencia mucho más curiosa es en el circuito mojado, a bordo de los Mercedes Clase A, también por comparativa con los Energy Saver+. Sólo hay 1 milímetro de agua (constante, eso sí) a lo largo de los 1,7 km de recorrido. Nos cuentan --y lo certifica el TÜV-- que con los Goodyear se hacen el circuito en 2,5 segundos menos que el promedio de tiempo que obtienen con las cubiertas de sus principales competidores.
Pero lo que vale es lo que sintamos nosotros, así que nos liamos a dar vueltas y descubrimos --y corroboramos con varios compañeros-- que los Goodyear se mantienen muy firmes hagamos lo que hagamos con ellos, y van avisando de cuándo estamos a punto de perder el control, mientras que los Michelin aguantan muy, muy bien, pero cuando los llevamos al límite, no avisan igual.
Para quitarnos los sinsabores de las piruetas en el agua, vamos a acabar con un recorrido sobre asfalto seco que, hombre, si nos abstraemos y pensamos en lo que hemos venido a ver, no nos dice nada, más allá de lo que ya habíamos visto con el Toyota Auris por la carretera.
Según nos cuentan, la vuelta a este circuito de 3,3 km es 1 segundo más rápida con estos neumáticos, pero es mucho más sencillo que todo eso: el Goodyear EfficientGrip Performance, sobre seco, aguanta lo que le eches. Y como de esto tenemos incluso una bonita grabación on-board realizada con data-box, pues nada, cuatro pinceladas técnicas y vamos a vídeo.
El secreto está en la masa
Si los amigos de Goodyear consideran 50 parámetros para probar sus neumáticos, no quiero yo ni pensar en la lista de variables que influirán en el comportamiento de los Goodyear EfficientGrip Performance. En la presentación nos apuntan unos cuantos, y nos muestran tanto con talleres metafóricos como con simulaciones de diseño industrial cuál es el secreto de estos neumáticos.
La baja resistencia a la rodadura viene dada en parte por la tecnología WearControl de Goodyear, que contribuye a un agarre más uniforme del neumático. También por la formulación del compuesto que se emplea en la banda del neumático, lo que la marca denomina CoolCushion Layer 2.
Asimismo, la formulación específica de los flancos redunda en un menor calentamiento, menos pérdida de energía en la fase de deformación del neumático y por tanto una menor resistencia entre neumático y terreno, y una menor exigencia energética para rodar. Por su parte, el ruido disminuye por la disposición de los bloques de goma en los hombros y por la disposición de los surcos, que son finos y contribuyen a absorber las vibraciones.
Pero donde el diseño de bloques muestra un mayor potencial es en la tecnología ActiveBraking, que ya se viene utilizando en los neumáticos de ultra altas prestaciones y que, en esencia, permite un mejor contacto entre los bloques del neumático y el terreno, acortando la distancia de frenado. También la escultura del neumático, con anchos canales principales, contribuye al control del vehículo en situaciones como la vista en la prueba del aquaplanning en curva.
Todo esto, en vídeo y fotos
Y como sé que estos temas son mucho más visuales que escritos, aquí os dejo un recuerdo en forma de vídeo y un par de enormes galerías de fotos para que saciéis vuestra voracidad sensorial.
Los gastos del viaje para esta presentación han sido asumidos por la marca. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas.
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