Walter Röhrl es el Lord of the Ring, el piloto de pruebas oficial de Porsche y quien ha marcado un tiempo (no oficial) de 7 minutos y 25 segundos para dar una vuelta completa al Nordschleife… con un Porsche GT. El genio sobre ruedas (como lo llamó Niki Lauda) ha tenido en sus manos al nuevo Porsche 911 GT2, hasta ahora, y para mí, la máquina definitiva de Porsche, y ha hecho un pequeño análisis para el programa alemán Abenteuer Auto. Coincide con tantos en afirmar que es un coche impresionante, y también dice que la entrega de potencia desde que apoyas el pie en el acelerador es fantástica.
Walter Röhrl conoce el Ring al dedillo, cada curva, cada desnivel, y en torno a sus correrías hay muchas anécdotas que contar, como cuando se encontró con Michael Schumacher (y lo “venció” con un Ferrari 599) o cuando “sólo” pudo hacer 7:32 con el nuevo GT2 porque en el camino tuvo que adelantar a 11 coches...
Todo en este Porsche es más preciso: la frenada es más estable, la dirección responde instantáneamente al volante, el límite se puede alcanzar con más “seguridad”. Comenta también que una de las mayores ventajas del GT2 sobre otros competidores es la capacidad de gestión de la entrega de potencia, bien llevada por los controles electrónicos, y que le permite dar gas a fondo mucho antes de lo esperado… y así conseguir lo que consiguió en el Nordschleife (igualar al Porsche GT).
Todo un tipo, y todo un coche (este fin de semana se me escapó que este coche es inmoral), quién tuviese las manos de este señor para controlar semejante máquina.
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