McLaren sigue fichando personal clave que le permita mejorar su rendimiento en pista además de sentar las bases para la temporada 2015. Después de un gran inicio en Australia con un podio y los dos coches en el top 5, a McLaren le ha costado mantener el nivel y no ha puntuado ni en Baréin ni en China. Por lo tanto, cualquier refuerzo es bienvenido. Esta vez, se trata de Tony Salter de Sauber y Guillaume Cattelani de Lotus.
Estos cambios siguen a la pequeña revolución organizativa con el nuevo director de carreras Éric Boullier y el CEO de F1, Jonathan Neale. Pero además, la llegada de Salter y Cattelani debe servir para ayudar al equipo hasta que Peter Prodromou llegue a bordo la temporada que viene. Siempre pendientes también de cómo se desarrolle la situación legal con Dan Fallows, evidentemente. Lo que sí está claro es que McLaren no está parada.
Pero no solo de personal son los cambios, ya que bajo órdenes de Ron Dennis, también se están realizando cambios en cómo opera el equipo McLaren. Mejores cadenas de comando y líneas de comunicación más claras es lo que pretenden. Para McLaren, se trata de mejorar la comunicación, lo que debería traer más eficiencia en el trabajo y a priori más capacidad de reacción y mejores resultados. Algo parecido a lo que quiere hacer Ferrari.
Pero evidentemente, por muy bien organizado que esté un equipo, no es nada sin los resultados pertinentes. Por ello se fijarán objetivos de rendimiento específicos para los distintos departamentos. También se marcarán responsabilidades más claras para el director técnico, Tim Goss y el director de ingeniería, Matt Morris. Esto les ayudará a aprovechar sus puntos fuertes y a priori debería dar a McLaren una nueva fuerza. Como siempre, el tiempo dirá. Pero McLaren corre el riesgo de caer en otra temporada 2013 y no es lo que necesitan ahora mismo.
Vía | Autosport.com
