Tras semanas de “jaleo” todo se soluciona con un nuevo pegamento. Posiblemente ha sido uno de los culebrones más largos, escandalosos y sin sentido en la Fórmula 1 durante los últimos años. Después de que Mercedes AMG y la propia Pirelli hayan sido llamados por los Tribunal Internacional para declarar sobre las pruebas secretas en Montmelò el mes pasado, todo ha terminado con la marca italiana cediendo y dejando la estructura de neumáticos tal y como estaba.
Ni tan siquiera los anillos exteriores, que sirven para dar forma a la carcasa sobre la que va situada la banda de rodadura, serán modificados, manteniendo los actuales de aluminio en vez de volver a instaurar los de kevlar que se usaban el año pasado. Esta decisión de Pirelli se debe a que los nuevos neumáticos no han podido ser probados por los equipos lo suficiente, y por tanto no ha habido unanimidad en la votación que hubiera permitido estrenarlos en el Gran Premio de Gran Bretaña. En lugar de eso, se pondrá un nuevo pegamento para intentar que no se vuelva a producir la delaminación.
