Para mí están al nivel de las 24 Horas de Le Mans. A pesar de no contar con los impresionantes prototipos LMP1 y LMP2 que participan en su homóloga francesa, las 24 Horas de Nürburgring lo contrarrestan con lo que para mí es un circuito perfecto en el que se pueden encontrar todo lo que necesitas en un trazado de estas características. Un infierno verde que hace que cada una de las vueltas que das a él sea completamente distinta a la anterior.
Este año un tanto deslucido por las difíciles condiciones meteorológicas que tuvieron parada durante muchos minutos la competición. Aun así, siempre es difícil ponerse en la piel de unos pilotos que tienen que afrontar una vuelta a Nordschleife en estas condiciones. En el video que os traemos hoy de los chicos de StereoScreen, podemos ver la magia que viven todos los años los equipos y los aficionados. Un infierno de carrera, pero un infierno perfecto.
