Durante el último mes, Toyota ha variado totalmente su estrategia con el coche eléctrico enchufable, pasando de desdeñar esta tecnología en favor de la pila de combustible (y los híbridos, claro está), a desvelar que tienen un nuevo plan que incluye la electrificación de varios modelos. De ser cierto, dejarían atrás un período de vacío que ha servido para que se extingan varios proyectos, como el del Toyota RAV4 EV.
El fabricante japonés ha anunciado así la llegada de varios modelos, pero resaltando que lo hará en mercados clave. Se refieren de forma especial a dos puntos del globo: California y China. De hecho, para este último país ya han programado un centro especial de desarrollo para culminar la electrificación de varios modelos, de entre los que ya han confirmado un Toyota Corolla híbrido enchufable, de momento solo para China.
Es curioso porque esta nuevo plan de Toyota no se ha centrado en un único comunicado. Las noticias del nuevo romance de los japoneses con las baterías de iones de litio ha multiplicado el trabajo de comunicación de la compañía. De este modo anuncian que mejorarán la autonomía actual de los vehículos eléctricos en un 15%, cifra que suena tan escasa como relativa en estos tiempos cambiantes.
El vacío mencionado también implica que Toyota no tiene una respuesta eléctrica inmediata. Al más puro estilo alemán, anuncian que sus revolucionarios enchufables llegarán para el cambio de década, coincidiendo con los Juegos Olímpicos de Tokio.
Mientras tanto, lo que sí seguirán potenciando es su tecnología híbrida. De este modo, han también anunciado un nuevo impulso económico para esta división, que se traducirá en un aumento de un 30% en la plantilla de esta y en la introducción de 19 nuevos componentes que aumenten el rendimiento de sus motorizaciones híbridas.
Y mientras esta último parece que sí afectará a escala global, es irremediable que nos preguntemos si Toyota ha cambiado definitivamente su estrategia eléctrica, o más bien es un parche temporal. Y es que, como decimos, no han dejado de señalar en todo momento que sus esfuerzos irán hacia esos mercados clave, es decir, aquellos en los que los requisitos con las emisiones se endurezcan. Cuesta pensar que después de su elaborado plan de 50 años para encumbrar la pila de combustible de hidrógeno hayan variado el rumbo hacia los 100% eléctricos.
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