Europa está levantando el túnel submarino más grande del mundo con una innovadora técnica de construcción: no se está perforando ni un metro de tierra

  • Costará 7.000 millones de euros y se espera que esté terminado en 2029

  • Es la primera vez que se utiliza esta técnica de construcción

Álvaro Ruiz

Por culpa de la orografía, muchas poblaciones europeas han estado separadas durante décadas por horas de trayecto en barco o larguísimos viajes por carretera. Cada vez son más los países que lo están solucionando con túneles submarinos, como el que pretende unir España con Marruecos o el que atravesará Génova de oeste a este a través de su puerto.

También hay otro de estos túneles en construcción entre Dinamarca y Alemania. Se trata del túnel de Fehmarnbelt, que unirá las localidades de Puttgarden (en la isla alemana de Fehmarn) y Rodby (en la isla danesa de Lolland). El objetivo es inaugurarlo en 2029.

Uno de los proyectos de construcción más ambiciosos del mundo

Este túnel comenzó a construirse hace cuatro años y no solo destaca porque será el túnel submarino más grande del mundo, sino porque se están utilizando técnicas de construcción completamente nuevas para darle forma.

Normalmente, para construir túneles muy profundos y largos bajo el mar, se utiliza una tuneladora gigante. Esta máquina excava por debajo del lecho marino, en suelo estable, e instala automáticamente los anillos de hormigón armado que acaban convirtiéndose en las paredes del túnel.

Con esa técnica se han construido estructuras como el Eurotúnel que cruza el canal de la Mancha para conectar Francia con Reino Unido. El túnel de Fehmarnbelt, en cambio, se está construyendo de una forma completamente nueva, al menos para un túnel submarino de tanta profundidad: mediante la técnica de túnel sumergido.

En lugar de excavar en el lecho marino, se están instalando secciones gigantes de hormigón que se fabrican en tierra firme. En total, el túnel tendrá 89 secciones, cada una de ellas con 217 metros de largo y un peso de 73.000 toneladas.

Dentro de cada pieza hay dos carriles para que circulen los coches en las dos direcciones, a los que se suman dos vías de tren electrificadas y un pasillo de servicio.

Las secciones se construyen en tierra firme, en una gigantesca fábrica situada en Dinamarca que se levantó específicamente para este proyecto. Según se terminan las secciones, unos barcos remolcadores las trasladan hasta el lugar donde deben instalarse, allí se sumergen y se colocan sobre una zanja de 18 km que se ha excavado en el fondo marino.

El agua que queda dentro de las secciones se bombea al exterior cuando se une una sección con otra y la presión del mar permite que queden selladas entre sí, aunque también hay un proceso de soldadura que corre a cargo de la empresa española DMC-Wire

“Cuando un elemento está listo para el envío, se colocan mamparos impermeables en ambos extremos y se remolcan en su lugar con tirantes. Los elementos se bajan al fondo marino con alta precisión y se acoplan cuidadosamente entre sí. Hay un espacio sellado entre los mamparos, de modo que una gran presión externa los empuja juntos cuando el agua se bombea. Esto asegura una conexión totalmente impermeable”, explica Femern.

Túnel submarino

En total, el túnel tendrá una longitud de 18 km, por lo que será el túnel submarino más largo del mundo y se está construyendo a 40 metros de profundidad. 

Cuando esté acabado en 2029, esta estructura permitirá completar en 10 minutos en coche o siete minutos en tren un trayecto que actualmente requiere 45 minutos en ferry. El coste estimado que tendrá este proyecto es de 7.000 millones de euros.

Imágenes | Femern

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com

VER 1 Comentario