De Honda a Tesla: así pasarán a producir equipamiento médico contra el coronavirus una docena de fabricantes de coches

La capacidad de este nuevo coronavirus SARS-Cov2 (o COVID-19) de colarse por las rendijas de nuestro sistema cada vez más interconectado a nivel global, hace que casi todos los países estén en una situación, que en algunos aspectos, es de guerra.

Y al igual que en tiempos de guerra, cuando las fábricas de automóviles debían fabricar municiones, carros de combate o aviones, en este nueva guerra contra este enemigo muy sigiloso la capacidad productiva se dedicará sobre todo a la fabricación de ventiladores, nombre coloquial que designa a los respiradores artificiales.

Ante la previsión de un número creciente de casos, los servicios sanitarios de todos los países temen que no tengan suficientes respiradores artificiales para poder tratar a los casos más graves. A cada lado del Atlántico, muchos son los fabricantes de automóviles que se han ofrecido a fabricar o diseñar esos ventiladores para que su producción sea rápida y efectiva.

McLaren, por ejemplo, está poniendo en pie un equipo de ingenieros para determinar como se pueden fabricar rápidamente y de forma sencilla. Esos dos aspectos son primordiales, el tiempo juega en contra nuestra y el interés de que sean fáciles de fabricar abriría la puerta a que casi cualquier fábrica pudiese ponerse a producirlos rápidamente.

Pero no es la única. Nissan también está poniendo en marcha un equipo similar en el Reino Unido, para ayudar a los fabricantes de respiradores. Además, Jaguar Land Rover, Honda, Vauxhall y Rolls-Royce (la rama de aviación que no tiene nada que ver con BMW) han respondido positivamente a la petición del ejecutivo británico para la fabricación de respiradores y están viendo cómo pueden hacerlo.

Fuera del Reino Unido, el grupo Airbus hará lo mismo con un equipo a nivel europeo. En el caso del fabricante de aviones, se valora poder utilizar sus sistemas de producción por impresión 3D y sus fábricas. “El objetivo es que haya un prototipo en dos semanas y que la fabricación comience en cuatro semanas", según recoge Reuters.

"Las técnicas de fresado de precisión y de impresión 3D podrían ayudar a fabricar piezas complejas", explicó Rene-Christopher Wollmann, director de programas y plataformas de Automobili Pininfarina. Pero añade que también las fábricas deberán adaptarse a una producción que la industria médica considere adecuadas (entorno estéril, por ejemplo). Y eso puede suponer un retraso importante, como advirtió Musk hace poco en Twitter: para cuando puedan estar fabricándolos, quizá ya no sean necesarios.

Y es que Tesla, al otro lado del charco, también se ha ofrecido a fabricar equipos de respiración artificial. Y lo hizo tras un primer intento de mantener en marcha la fabricación de sus coches pesa a la orden de cese de actividad que estaba en vigor en California.

En el caso de Tesla, Elon Musk se ofreció en Twitter a fabricar esos equipos ya que, recordaba, los Tesla equipan sistemas de filtración de aire capaces de aguantar un ataque químico y que Space X fabrican también sistemas de respiración artificial. El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, le tomó la palabra y ya le ha pedido ayuda.

Por otra parte, Ford y General Motors también se han ofrecido a ayudar en la fabricación de equipos médicos para luchar contras las consecuencias del COVID-19.

En Europa, Fiat, Ferrari y SEAT ya se han ofrecido

Mientras tanto, en Europa continental, las fábricas de automóviles han cerrado sus puertas temporalmente para oficialmente evitar la propagación del virus (en realidad, no sirve de nada fabricar y acumular stock si nadie puede salir a comprar un coche y no sabe cuándo podrá hacerlo de nuevo).

En Italia, Fiat y Ferrari se han puesto en contacto con el fabricante de equipos médicos Siare Engineering para ayudarles a aumentar su producción, según Reuters. Tanto Fiat como Ferrari podrían poner al servicio de Siare su inmensa red logística y de proveedores para aumentar lo más rápido posible la producción de ventiladores.

En España, el Consorci de la Zona Franca de Barcelona, Hewlett-Packard, líder en equipos industriales de impresión 3D; Leitat y SEAT han puesto a disposición de las autoridades y centros sanitarios sus profesionales y conocimientos tecnológicos, para dar respuesta a las necesidades que puedan surgir vinculadas a la lucha contra la propagación del COVID-19 mediante tecnologías de fabricación aditiva. Además, el Consorci se ofrece a facilitar la coordinación de sus recursos a cualquier proyecto particular que se esté llevando a cabo y se quiera escalar a nivel industrial.

Por otra parte, Renault pondrá a disposición la veintena de impresoras 3D de la compañía y sus consumibles a disposición de un grupo de empleados de la marca. Éstos han decidido hacer desde sus casas y con sus impresoras 3D particulares mascaras para hospitales y residencias de ancianos. Asimismo están colaborado con un grupo nacional en el diseño de respiradores que también se realizarán en impresoras 3D.

Recordemos que el COVID-19 puede atacar en los casos más graves los pulmones y provocar severas graves dificultades respiratorias. En estos casos un llamador ventilador, el respirador artificial que hace las funciones de inhalación y exhalación por el paciente que no puede, supone la vida o muerte de ese paciente. Es poco probable que las marcas acaben fabricando un respirador al completo, pero quizá sí puedan fabricar algunas de las piezas que se necesitan o poner a disposición su logística. Sea como fuere, cualquier ayuda es la bienvenida.

En Motorpasión | Así es el curso de conducción segura de Jaguar Land Rover: bailando en la nieve para mejorar en el manejo del coche

También te puede gustar

Portada de Motorpasión

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com

VER 6 Comentarios