Lando Norris y la trampa de la última carrera. Cinco precedentes que demuestran que Max Verstappen (y Oscar Piastri) no está muerto

Hace tanto tiempo que un mundial de Fórmula 1 no se resuelve en la última carrera que más de uno está cometiendo un error de novato a la hora de afrontar el Gran Premio de Abu Dabi de este domingo: creer que Lando Norris ya lo tiene hecho porque solo necesita hacer una carrera fácil sin meterse en líos para ser campeón.

La de 2025 será la décima vez que el mundial de Fórmula 1 se decida en la última carrera en el siglo XXI. Y echando un vistazo a las nueve anteriores hemos encontrado algo sorprendente: en seis de esas nueve ocasiones el que era favorito y solo necesitaba evitar líos acabó llevándose una sorpresa inesperada que casi le deja sin mundial.

El de 2025 será el décimo mundial decidido en la última carrera en el siglo XXI

Si hay un rey de las resoluciones en última carrera ese es Fernando Alonso. El asturiano ha protagonizado cuatro de las ocho carreras decisivas de lo que llevamos de siglo, y solo se llevó el título en una. Eso sí, fue la más tranquila de toda. En 2006 a Alonso le bastaba con ser octavo para ganar el título en Brasil, y terminó segundo sin mayores sobresaltos.

Aquello fue la excepción. El primer mundial de este siglo resuelto en la última carrera fue el de 2003, en Suzuka. A Michael Schumacher le bastaba con acabar octavo para ganar el título. Pues bien, acabó justamente octavo, después de una carrera tortuosa en la que salió decimocuarto, rompió alerón e hizo un trompo. Kimi Raikkonen se quedó a dos puntos de levantarle el título.

Cómo olvidar aquellas finales en Interlagos en 2007 y 2008, las pesadillas de Lewis Hamilton. En 2007 al británico le hubiese bastado con acabar quinto, pero fue séptimo después de una salida de pista y un extraño lío con los botones. El mundial se lo llevó Raikkonen, que llegaba tercero y con pocas opciones, más o menos como Oscar Piastri este domingo en Abu Dabi.

El mal sueño casi se repite para Hamilton en 2008. Le bastaba con acabar quinto en Interlagos para llevarse el título, y lo consiguió adelantando a Timo Glock literalmente en la última frenada de la carrera, cuando ya parecía que había perdido el mundial. Un título que, por otro lado, todavía está siendo discutido en los tribunales.

El siguiente mundial decidido en la última carrera fue el de 2010, en Abu Dabi. A Fernando Alonso le hubiese bastado con un quinto puesto, pero una pésima estrategia de Ferrari le dejó atascado detrás de Vitaly Petrov. Terminó séptimo y el mundial lo ganó Sebastian Vettel, que llegaba en la tercera posición y casi descartado.

Dos años después Alonso casi tuvo la revancha. A Vettel le bastaba con acabar cuarto en Interlagos para asegurarse el título, pero Bruno Senna se lo llevó por delante en la salida y dejó dañado su Red Bull. El alemán pudo remontar hasta sexta posición, con una parada en boxes calamitosa de por medio, y solo se llevó el título porque Alonso no fue capaz de ganar la carrera.

En la era híbrida otros tres mundiales se decidieron al final. En 2014 hubo poca intriga. A Hamilton le bastaba con ser tercero, pero una temprana avería de Nico Rosberg acabó con la emoción. En 2016 al propio Rosberg le bastaba con ser tercero, y aunque Hamilton frenó para meterlo en líos, el alemán logró su título siendo segundo con agonía pero sin sobresaltos. 

Fue el propio Hamilton quien en 2021 se llevó un susto del que todavía no se ha recuperado. El inglés tenía controlada la carrera y el título en Abu Dabi, cuando a pocas vueltas del final Nicholas Latifi se estrelló y provocó un coche de seguridad que volvió a meter en la batalla a Max Verstappen. En la relanzada, el holandés pasó a Hamilton y se llevó su primer mundial de Fórmula 1.

Este domingo, a Lando Norris le basta con acabar tercero para llevarse el título, y parece que pocos rivales le podrían incordiar. Pero si algo nos demuestra la historia es que creerse campeón antes de cruzar la línea de meta en la última carrera y no saber nada de Fórmula 1. Verstappen y Piastri tendrán sus oportunidades.

Imágenes | Fórmula 1, Red Bull

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